Durante la sesión abierta del Consejo de Ministros que se llevó a cabo el lunes en Rocha, el presidente Tabaré Vázquez aseguró que ya hay señales que dan cuenta del inicio del “cambio en el ADN de la educación”. Ayer la ministra de Educación y Cultura, María Julia Muñoz, confirmó las palabras del mandatario y anunció que ya está “casi pronta” la lista de los cromosomas a los que piensa echar “para darle a este cambio un dinamismo y una ejecutividad que con los cromosomitas de cuarta que tenemos en la actualidad son impensables”. La jerarca cree que esta decisión la volverá el centro de innumerables críticas, pero consideró que esto se debe a que “en esta sociedad patriarcal en la que vivimos no está bien visto que una mujer ocupe cargos de importancia, insulte a diestra y siniestra y replique medidas adoptadas por la dictadura”. Otro de los temas abordados por el presidente Vázquez fue el de las enfermedades cardiovasculares, una de las principales causas de muerte en Uruguay y en el mundo. “Esto es mucho más que un problema de salud pública. Es un problema que afecta las bases mismas de la democracia. Las enfermedades cardiovasculares acortan la vida de gente que podría seguir gobernando hasta los 115 años. Hoy por hoy, un dirigente político que cumplió los 95 ya tiene que empezar a pensar en su retiro”, aseguró. El mandatario declaró: “A nosotros nos hubiera gustado nacer en la Edad Media y ser reyes, pero sin la parte de que la expectativa de vida era de 45 años, porque eso nos hubiera impedido llegar a ser gobernantes octogenarios”. Según Vázquez, la solución a las enfermedades cardiovasculares pasa por controlar fenómenos como “el tabaquismo, el consumo de sal y el sedentarismo”. Con respecto a los riesgos que podría traer aparejado el consumo de carne vacuna, el mandatario afirmó que “los estudios científicos realizados por el Instituto Nacional de Carnes y la Asociación Rural del Uruguay indican claramente que no es un factor significativo”.