El Ministerio de Relaciones Exteriores difundió esta tarde un comunicado sobre la destitución de Dilma Rousseff como presidenta de Brasil. Según el texto, el gobierno uruguayo “ha seguido con atención los procesos políticos y jurisdiccionales” del país vecino y concluyó que “más allá de la legalidad invocada, es una profunda injusticia”. El Poder Ejecutivo uruguayo “aspira a que, en el marco de la institucionalidad democrática, el pueblo brasileño alcance sus objetivos de estabilidad y desarrollo”.

“Uruguay desea destacar el rol de la Presidenta Dilma Rousseff en fortalecer la histórica relación bilateral, que permitió alcanzar una alianza estratégica que ha redundado en beneficio de ambos pueblos”, sigue el comunicado.