El presidente de Argentina, Mauricio Macri, encabezó el cierre de campaña de la coalición oficialista Cambiemos en la ciudad de Buenos Aires en el microestadio de Ferro Carril Oeste, en Caballito, un día después de que la ex presidenta Cristina Fernández reuniera a 70.000 personas en el estadio de Racing, en Avellaneda.

En el acto también participó la cabeza de lista de Cambiemos para la Cámara de Diputados por Buenos Aires, Elisa Carrió, quien es la favorita para las elecciones legislativas del domingo, así como el alcalde porteño, Horacio Rodríguez Larreta, y la gobernadora de Buenos Aires, María Eugenia Vidal.

Macri aseguró que desde que comenzó su gobierno se ha logrado un “retroceso” del narcotráfico. “Hemos empezado a echarlos del país, es un largo camino pero vamos muy bien”, sostuvo. Y agregó: “No vamos a parar. Y ojo con aquellos que son cómplices de lo que sucedió la década pasada. Ojo con aquellos que creen que desde la política, la Justicia, el empresariado y sindicalismo pueden ser socios: van a terminar como los narcos, todos presos”.

El día del cierre de campaña de Cambiemos en la ciudad de Buenos Aires coincidió con una decisión de una cámara de apelaciones con respecto al ex ministro de Transporte Julio de Vido. Un tribunal de apelaciones exigió a un juez que formalice inmediatamente el pedido de desafuero contra el ahora diputado para que pueda ser detenido en prisión preventiva a espera del juicio en su contra

Desde el kirchnerismo llamaron la atención sobre que este pedido judicial coincide con la última semana de campaña previa a las elecciones legislativas. En esta línea, el dirigente Luis D’Elia viene advirtiendo desde hace días que teme ser detenido como parte de una operación política este jueves, día en el que debe declarar ante la Justicia por la denuncia que presentó el fiscal Alberto Nisman antes de morir.