El canciller de Brasil, José Serra, renunció hoy a ese cargo porque sus problemas de salud le “impiden mantener el ritmo de los viajes internacionales inherentes a la función”, según comunicó en una carta dirigida al presidente Michel Temer, que todavía no definió quien será su reemplazante.

“Según los médicos, el tiempo para la recuperación adecuada es de al menos cuatro meses”, señala el diplomático y político, integrante del Partido de la Social Democracia Brasileña (PSDB).

En diciembre Serra se sometió a una cirugía en la columna vertebral y necesita un tratamiento intensivo de cuatro meses para recuperarse, informó el diario Folha de Sao Paulo. El dirigente dijo que fue un honor integrar el equipo de Temer y que mantendrá su banca de senador.