Convertido no sólo en la mayor autoridad actual del hip hop, sino también en el dueño de un auténtico imperio estético de música, ropa y un sinnúmero de inversiones, el rapero Jay Z planea ingresar en el mundo del audiovisual mediante un documental -y tal vez una biopic- sobre la muerte de Trayvon Martin, uno de los casos más polémicos de las conflictivas relaciones raciales estadounidenses de los últimos tiempos, así como uno de los hechos fundacionales del movimiento Black Lives Matter (las vidas negras importan).

Martin tenía 17 años cuando fue muerto a balazos en 2012 por un guardia privado, en circunstancias aún discutidas, que fueron origen de las mayores movilizaciones contra la violencia racista desde los tiempos del juicio a Rodney King. Sobre su caso se ha tejido todo tipo de hipótesis y se escribieron al menos dos libros, cuyos derechos compró Jay Z: Suspicion Nation: The Inside Story of the Trayvon Martin Injustice and Why We Continue to Repeat It (Nación de sospechas: La historia interna de la injusticia de Trayvon Martin y por qué seguimos repitiéndola), de la escritora y abogada Lisa Bloom; y Rest in Power: The Enduring Life of Trayvon Martin (Descansa en poder: La duradera vida de Trayvon Martin), de Sybrina Fulton y Tracy Martin, padres del baleado. Con estos derechos, el músico llegó a un arreglo con la productora Weinstein de Nueva York -ciudad natal y feudo artístico de Jay Z-, caracterizada por sus films de contenido social, para realizar un documental de seis episodios basados en el caso y su juicio, así como una película interpretada por actores, dándole un tratamiento similar al que recientemente recibió la biografía de OJ Simpson.