Ayer el mundo teatral se vio conmovido por la noticia de que había fallecido un maestro. Pedro Elbio Bertoloni, mucho más conocido por su nombre artístico, Roberto -o Berto- Fontana, fue parte de la historia del teatro independiente y dejó una profunda huella como actor (con muy recordadas interpretaciones, entre ellas, en 1982, la de Galileo Galilei, por la cual se le otorgó un Florencio que no fue a recibir), director y docente. Dedicado por entero al teatro, al que se acercó a los 17 años, desarrolló desde los años 50 una escuela propia de manejo de la voz para actores, a la que llamó “fonética teatral”, y la enseñó a varias generaciones dentro y fuera de Uruguay, contando también entre sus alumnos a locutores, periodistas y políticos.

Se retiró de los escenarios en 2015, después de actuar en El hábito del arte. Escribió los libros Memoria en dos actos: mi testimonio sobre el teatro independiente de Montevideo y Fonética práctica; en 2006 recibió un Florencio a la trayectoria y en 2009 fue declarado Ciudadano Ilustre de Montevideo.