La historia de la banda de rock Mötley Crüe parece, más que la historia de una banda de rock, la leyenda exagerada de una, o incluso su caricatura; una sucesión de excesos y demencias que, si tan sólo un tercio de los hechos narrados en los numerosos libros escritos por biógrafos e integrantes del grupo fueran verdad, habrían sido causa más que suficiente para que estos últimos murieran varias veces, o para hacer una película basada en sus andanzas semejante al falso documental humorístico This Is Spinal Tap (Rob Reiner, 1984), pero más violenta y totalmente en serio.

Formados a comienzos de los años 80 y representantes del subgénero al que se dio en llamar glam metal (por analogía con el glam rock de la década anterior), los Mötley Crüe hicieron equilibrio, musicalmente, entre el lado más pop y fotogénico del heavy metal (incluyendo unas cuantas incursiones en el territorio de las power ballads) y cierto corazón de rockeros reventados que los hacía tocar mucho más fuerte y sonar más peligrosos que sus innumerables imitadores. Así, y entre muchas grabaciones olvidables, fueron capaces de componer por lo menos un puñado de auténticos clásicos del hard rock como “Live Wire”, “Too Young to Fall in Love”, “Girls Girls Girls” o “Kickstart my Heart”, que siguen siendo totalmente escuchables tres décadas más tarde. Pero, además, durante sus años de gloria (básicamente los 80, aunque siguieron tocando -y metiéndose en problemas- hasta el fin de 2014), la banda participó en toda clase de orgías, accidentes, problemas legales, abusos de drogas y alcohol, escándalos públicos y anécdotas impresentables que fueron reunidas en los libros autobiográficos que tres de sus integrantes escribieron (el cantante Vince Neil, el bajista Nikki Sixx y el baterista Tommy Lee; el guitarrista Mick Mars siempre fue el más reservado del grupo y hasta ahora no escribió su autobiografía), así como una biografía oral llamada The Dirt: Confessions of the World's Most Notorious Rock Band (La mugre: confesiones de la banda de rock más notoria del mundo), que se realizó contando con entrevistas con los cuatro músicos como fuentes privilegiadas.

Sobre este libro, publicado en 2001, es que Netflix ha anunciado el proyecto de filmar una película biográfica en colaboración con la banda y con MTV, cadena hoy dedicada a cualquier cosa menos a los videos musicales, pero que tuvo a los Mötley Crüe como uno de sus grupos más representativos. Todavía se desconoce el elenco definitivo, pero ya se sabe que Johnny Knoxville -un actor muy ligado también con MTV, ya que fue la principal figura del programa Jackass- interpretaría al líder y bajista Nikki Sixx.

En la historia de Mötley Crüe hay choques de autos fatales, personajes inefables como Sixx -que fue declarado muerto por sobredosis no una, sino dos veces-, videos caseros sexuales hurtados (la ahora legendaria filmación de Tommy Lee con su entonces esposa, la actriz Pamela Anderson), discusiones internas que terminaban en batallas campales y toda una concepción de la forma de vida del rock que hoy en día suena irracional, autodestructiva e impresentable, pero que en algún momento parecía ser parte ineludible del trabajo de cualquier banda que se respetara a sí misma.