El empresario brasileño Marcelo Odebrecht, ex presidente de la empresa constructora Odebrecht, aseguró ante la Justicia de su país haber pagado más de cuatro millones de dólares al ex presidente Luiz Inácio Lula da Silva entre 2012 y 2013, durante el período de gobierno de Dilma Rousseff.

Odebrecht declaró ayer ante el juez federal Sérgio Moro, quien lleva adelante las investigaciones del gigante caso de corrupción de Petrobras. Según aseguró la agencia de noticias Efe, el empresario dijo que Lula es en realidad el beneficiario de los pagos descubiertos en las libretas de contabilidad de la empresa, bajo el nombre de “amigo”.

Esta es la primera declaración de Odebrecht ante la Justicia, que accedió a delatar la trama de corrupción a cambio de tener una rebaja en la condena. El empresario también declaró que hizo varios pagos al Instituto Lula, dirigido por el ex presidente, con el objetivo de comprar el terreno en el que debía construirse el edificio que sería utilizado como sede para esta organización.

Tras conocer las acusaciones, el Instituto Lula emitió un comunicado en el que rechazó los dichos de Odebrecht y aseguró que el ex mandatario no comentaría ninguna declaración bajo sigilo en la Justicia “filtrada selectivamente y de forma ilegal”.