La Justicia procesó a un subcomisario, una operadora penitenciaria y diez guardias penitenciarios tras comprobar que practicaban golpizas a internos en el Módulo 12 de la Unidad N°4 del Instituto Nacional de Rehabilitación (INR), el ex Complejo Carcelario (Comcar).

La información fue dada a conocer hoy por un comunicado del Ministerio del Interior. El único procesado con prisión fue el subcomisario, como “autor de un delito de abuso de autoridad contra los detenidos en ocurrencia fuera de la reiteración con reiterados delitos de lesiones personales en calidad de autor”.

Según comunicó la cartera, la denuncia fue iniciada a mediados de marzo por la madre de un recluso, que se quejó de que su hijo sufría castigos físicos de parte de efectivos del Grupo de Requisa de ese módulo. La mujer aportó fotografías que dieron lugar a la participación del Departamento de Investigación y Análisis Penitenciario. Esta unidad le informó de la situación a la jueza Julia Staricco. Las propias cámaras de seguridad de la unidad del INR comprobaron una golpiza el 14 de marzo, que se convirtió en la “prueba principal” que permitió el procesamiento de estas personas. Pero como estas imágenes no permitieron identificar con claridad la identidad de los principales protagonistas de las golpizas, la jueza pidió el testimonio de los guardias penitenciarios y de una operadora del recinto. Ante la “negativa general”, fueron procesados sin prisión todos los miembros del Grupo de Requisa, que ahora deberán cumplir tareas comunitarias por 120 días (cuatro horas por día).

Según el comunicado, el director del INR, Gonzalo Larrosa, dispuso que en adelante los funcionarios penitenciarios que participen en los grupos de requisa deberán portar cámaras personales de filmación para registrar todas las acciones que realicen en este tipo de instancias.