El presidente Tabaré Vázquez aseguró que de haber sido juzgado negativamente por el Tribunal de Conducta Política, hubiera dado un paso al costado.

El presidente fue abordado por el semanario Búsqueda y fue consultado acerca de si seguiría en un cargo político ante una “situación de observación de su fuerza política”. Vázquez recordó que él ya había estado en la mira del Tribunal de Conducta Política, en 1996, acusado de haber intervenido en la compra de equipos a una empresa que integraba uno de sus hijos. El fallo de este cuerpo, sin embargo, fue favorable a Vázquez. “Sí, si no, yo me hubiera ido”, aseguró.

Según Vázquez, la situación del vicepresidente Raúl Sendic implica una situación “delicada y seria institucionalmente”. “Yo como presidente de la República no lo puedo sacar porque hay separación de poderes y él es parte de otro poder del Estado. Felizmente, hay separación de poderes y se respeta. Será una decisión personal. Veremos lo que dice el Tribunal, veremos lo que dice la Justicia”, dijo el mandatario, que sostuvo que si Sendic presenta la renuncia se “estudiará” cómo proceder. “Previo a que se expidan los tribunales yo no se lo podía aceptar por lo que acabo de decir, que nadie es culpable hasta que se demuestre lo contrario. Ahora, después, es un tema individual”, agregó.