El ministro de Salud Pública, Jorge Basso, dio a conocer las cifras de mortalidad infantil en Uruguay en 2017 y subrayó que estas bajaron a un mínimo histórico.

Tras la reunión del Consejo de Ministros, Basso destacó que la mortalidad infantil bajó a 6,6 niños fallecidos por cada mil nacidos, lo que significa una baja considerable respecto de 2016 (7,9 por cada mil nacidos) y se trata de la cifra “más baja en la historia del país”.

Según dijo, en este número no incidieron ni los abortos terapéuticos ni los procesos de interrupción voluntaria del embarazo, que alcanzan un promedio mensual de entre 810 y 820 procesos, especificó.

Además, Basso sostuvo que en 2017 siguió disminuyendo el embarazo adolescente, que es “el principal objetivo de esta administración”. Atribuyó el logro a las políticas anticonceptivas.