El Instituto de Estudios Legales y Sociales del Uruguay divulgó el viernes un comunicado en el que denunciaba que el coronel retirado Eduardo Ferro, acusado de varios crímenes de lesa humanidad cometidos durante la última dictadura, se encuentra prófugo en España, por lo que no podría ser extraditado a Uruguay, tal como reclama la Justicia. “La situación es difícil. Si en lugar de venir a Uruguay a vivir en una prisión VIP y cobrando una jubilación millonaria prefiere ser prófugo en España es que realmente no tiene intenciones de entregarse”, declaró un funcionario del Ministerio de Relaciones Exteriores. Es que la estrategia del gobierno en este caso está “100% centrada en la esperanza de que Ferro se entregue voluntaria y dócilmente”, explicó la fuente consultada. “Técnicamente, este militar está desaparecido. Y a nosotros no nos gusta hacer cosas para encontrar desaparecidos”, agregó. El Poder Ejecutivo estaría considerando la posibilidad de establecer una suerte de comisión de la verdad, que reuniría a personalidades que no tienen mucho que ver con el tema pero que supuestamente trabajarían para averiguar el paradero del represor. “Sabemos que eso no es suficiente, por eso mismo planeamos crear dos o tres organismos más de acá a fin de año, que a lo mejor no van a ser muy útiles para cumplir con su finalidad declarada, pero para hacer de cuenta que el tema nos importa sin dudas va a ser de gran ayuda”, declaró el funcionario de Cancillería.