La Junta Internacional de Fiscalización de Estupefacientes (JIFE) acusó en su informe de 2018 a Uruguay y Canadá de poner en peligro la normativa internacional antidroga al aprobar leyes que permiten la venta de cannabis con fines recreativos.

“La aplicación universal y plena de los tratados corre un grave peligro porque algunos Estados parte, como Canadá y Uruguay (así como varios estados de los Estados Unidos), han legalizado el consumo de cannabis con fines no médicos”, dice el informe de este organismo, según consigna la agencia Efe.

“Las medidas adoptadas por esos países y jurisdicciones estatales pueden socavar los tratados. Además, pueden alentar a otros Estados parte a seguir su ejemplo y usarlo para justificar sus propias acciones”, agrega la JIFE, que funciona como un órgano independiente dentro de Naciones Unidas.

“La legalización del cannabis con fines recreativos, como se ha visto en un pequeño número de países, representa no solo una dificultad para la aplicación universal de los tratados y para los signatarios de los mismos, sino también un problema importante para la salud y el bienestar, en particular de los jóvenes”, resume el presidente de la JIFE, Viroj Sumyai, en el informe.

No obstante, la JIFE asegura tener “la determinación de seguir manteniendo un diálogo constructivo con los Gobiernos de los países en los que se está autorizando el consumo 'recreativo' de cannabis”.