Tras un acuerdo con la Fiscalía, la Justicia condenó a la ex senadora suplente y abogada Michelle Suárez a cumplir dos años de prisión domiciiaria y otros dos de libertad vigilada.

Suárez enfrenta acusaciones por cinco delitos de falsificación de firmas en reiteración, más dos de estafa y uno de falso testimonio, informó El Observador. La exsenadora venía cumpliendo prisión domiciliaria desde abril de 2018 por estafa y falsificación. Según el acuerdo, no podrá ejercer su profesión durante el tiempo que dure la condena ni tampoco podrá ocupar cargos públicos.

Desde el año pasado, Suárez se encuentra inhabilitada por la Suprema Corte de Justicia a ejercer como abogada.