Boris Johnson fue elegido hoy como próximo primer ministro de Gran Bretaña y líder del Partido Conservador, según el resultado de la elección interna divulgado a este martes.

Johnson era el favorito para suceder a Theresa May, competía con el actual ministro de Exteriores, Jeremy Hunt, en un proceso electoral que empezó el pasado junio tras el anuncio de May por la crisis del “brexit”.

Según recuerda la agencia Efe, en las últimas semanas, los 160.000 militantes votaron en estas primarias, luego de que los diputados del partido celebrasen una serie de elecciones para ir eliminando a los distintos candidatos (10 en total) hasta que quedaron dos.

En esta última instancia, Johnson recibió 92.153 votos frente a los 46.656 de Hunt. La participación electoral se situó en el 87,4 %.

Tras ser proclamado líder conservador, Johnson agradeció el “servicio” dedicado por la actual primer ministra Theresa May a la agrupación y al Reino Unido, en un discurso que dio en el centro de conferencias “Queen Elizabeth II”. Luego, el nuevo líder conservador aseguró que “unirá” al Reino Unido, al que le “dará energía” y un espíritu “de que podemos hacer” las cosas.

El cambio de primer ministro se producirá mañana, cuando May acuda al palacio de Buckingham para presentar su dimisión a la reina Isabel II, y comunicarle que su partido tiene un nuevo líder.

Algunos miembros del Ejecutivo de May ya adelantaron que renunciarán una vez que asuma Johnson: el proeuropeo titular de Economía, Philip Hammond; el ministro de Justicia, David Gauke, y el responsable de Cooperación Internacional, Rory Stewart.

Durante la campaña interna, Johnson había dejado en claro que cumpliría con la fecha del “brexit”.

Las dudas en torno a Johnson llegan también a Bruselas, ciudad sede de la Unión Europea: las negociaciones con May fueron duras, pero se prevé que con él sean más difíciles todavía, especialmente a medida que se acerque la fecha límite, que es el 31 de octubre. Johnson lo ha mostrado en campaña: amenazó con una salida sin un acuerdo que establezca cuáles serán después las relaciones entre Reino Unido y la Unión Europea, y también con no pagar la “compensación” a la que su país se comprometió si no hay avances en las negociaciones.