Las autoridades nacionales están preparando un inusitado operativo de fiscalización para esta Noche de la Nostalgia, con el objetivo de evitar que se realicen fiestas clandestinas. La mayor preocupación del gobierno nacional es que se produzcan aglomeraciones que faciliten la propagación del coronavirus, pero también existen otros temores. Desde Cabildo Abierto (CA) pretenden que se controle además que no haya bailes homosexuales en ninguna fiesta, por más pequeña que sea. El senador Guido Manini Ríos aclaró que “en CA no tenemos nada en contra de los homosexuales”, pero indicó que “tampoco podemos apoyar una visión distorsionada de la historia, que sugiera cosas que en realidad nunca pasaron”. El general denuncia que “nos quieren hacer creer que en los 70 y los 80 los hombres se besaban entre sí en público, y eso nunca pasó. Los jóvenes que no vivieron esa época tienen que saber que el homosexualismo en público es un fenómeno de este siglo, que surgió fundamentalmente a raíz de la internalización de la izquierda Soros, pero que no forma parte de nuestras tradiciones”.

En CA también consideran que en la Noche de la Nostalgia se debería pasar exclusivamente la música que sonaba en los 70 y los 80, y no “la música que en aquel momento estaba proscrita, como Los Olimareños o Zitarrosa. No tenemos nada contra ellos ni defendemos que los hayan censurado, simplemente queremos ser fieles a los acontecimientos históricos”.