Ayer se confirmó que el próximo concurso oficial del Carnaval, que tradicionalmente se lleva a cabo en el Teatro de Verano, esta vez se mudará al estadio Centenario. Uno de los motivos del cambio es que ese escenario permite implementar mejores medidas de seguridad contra el coronavirus, pero no es el único. Desde la Intendencia de Montevideo explicaron que el Centenario “también nos facilita instalar una terna de árbitros que se dedicará a controlar que los potenciales abusadores sexuales no se pasen de la raya”. Aún no se ha definido si además de los tres árbitros en el escenario se agregará un sistema de VAR. “En principio, nos ayudaría a detectar más casos de acoso, pero a estos tipos les gusta filmarse y sacarse fotos, así que a lo mejor esto termina siendo contraproducente”, explicó un funcionario de la comuna.

Tanto el gobierno municipal como las gremiales de carnavaleros creen que la visibilización de denuncias de acoso en el carnaval a través de las redes sociales no alcanzarán para erradicar el acoso. “Todo eso del arrepentimiento y el proceso de deconstrucción no es muy creíble, necesitamos un lugar donde poder vigilar bien a estos degenerados”, reconoció la fuente consultada.

Otra de las ventajas del Centenario es que “al haber un vestuario de locatario y otro de visitantes claramente delimitados, nos sirven para separar a hombres de mujeres”.