Buenos días. Les comento algunas noticias que pueden leer hoy en la diaria.

A mediados de marzo, Cabildo Abierto (CA) anunció que sólo se aliaría con el resto de la “coalición multicolor” para las departamentales de 2025 si podía presentar candidaturas a la intendencia en los 19 departamentos, dentro de un nuevo lema “neutro”.

Desde entonces, aquel planteamiento no ha tenido respuesta y las relaciones de los cabildantes con el resto del oficialismo empeoraron, por la forma en que Guido Manini Ríos presionó para imponer cambios de la reforma jubilatoria y por el posterior cese de Irene Moreira como ministra de Vivienda, dispuesto por el presidente Luis Lacalle Pou. Mientras tanto, el secretario general del Partido Colorado (PC), Julio María Sanguinetti, va urdiendo sus propios planes para las alianzas en 2025.

Hace dos semanas las autoridades coloradas se reunieron con las del Partido Independiente (PI), y ayer hicieron lo mismo con las del PN. Se informó que Sanguinetti insiste con la idea, nada novedosa, de que haya coalición contra el Frente Amplio en todos los departamentos, pero es posible que se esté hablando de algo más.

Ayer el presidente del directorio del PN, Pablo Iturralde, señaló que la propuesta colorada se discutirá con dirigentes de todos los departamentos, porque su partido tiene “una concepción federal muy importante”. La federación nacional reúne a las federaciones departamentales, formadas por listas, caudillos, caudillitos y juntavotos dispersos, que se apoyan en tradiciones familiares y lealtades genuinas, pero también en “gauchadas” clientelistas y reparto de cargos al menudeo. Todos suman para el PN pero también compiten entre sí, forman y rompen alianzas estables o transitorias, procesan relevos generacionales a veces conflictivos y pueden ir variando, en cada elección, su alineamiento con los líderes mayores del partido.

Esta complejidad interna es difícil de manejar en la actualidad, con un máximo de tres candidaturas a la intendencia por partido, pero podría resultar insostenible si el PN sólo dispusiera de una en el marco de la “coalición multicolor”. Por eso no fue viable, en muchos departamentos, un acuerdo como el del Partido de la Concertación en Montevideo (donde, además, la descentralización en municipios con cantidades considerables de vecinos facilita que la “concepción federal” no desaparezca).

La realidad del PC fue similar en épocas mejores, pero se ha ido simplificando debido a la pérdida de votantes, y por eso a Sanguinetti le alcanzaría hoy con que los suyos tuvieran una sola candidatura en cada departamento. El PI puede recibir alguna compensación en otro terreno, pero si CA tuviera, como demandó, 19 candidaturas, los nacionalistas se verían en aprietos.

Sin embargo, Sanguinetti dijo ayer tres cosas sugestivas: destacó que su objetivo es asegurar la presencia del PC en los departamentos donde la mayoría nacionalista es muy fuerte; dijo que no es “seguro ni inseguro” que vaya a reunirse con CA; y habló de la inconveniencia de las “corrientes extremas”. ¿Estará pensando en acuerdos departamentales sin cabildantes, en los que nacionalistas y colorados se repartan las tres candidaturas, dos para el partido mayoritario y una para el otro?

Hasta mañana.