Posturas
Los 52 años del Frente Amplio
Al divergente se lo silencia a como dé lugar, y las diferencias, claro está, se ocultan debajo de la alfombra y bien guardadas. Sucede que a veces las alfombras ya no pueden tapar más y fracasan en su rol de silenciar, callar y prohibir. Si en estos años algo me ha quedado claro, es que no hay izquierda sin libertad.