Con un puntaje ideal en la fase de grupos, un promedio de tres goles por partido y una oncena de suplentes, le ganó a Inglaterra. Por eso pasó como primera, y con sus individualidades jugando una mejor que la otra. Por eso Bélgica es favorita hoy en la llave de octavos de final que se jugará de tarde.

La historia de Japón en Rusia 2018 es bien diferente. Su camino arrancó bárbaro cuando le ganó a Colombia, pero lo cierto es que después de ahí no se mantuvo. Empató con Senegal y perdió con Polonia, derrota que así y todo le dio la clasificación porque Colombia le ganó a la selección senegalesa –clasificación que también, hay que decirlo, logró tocando para los costados–.

El español Roberto Martínez, técnico de los belgas, guardó todo el equipo pensando en octavos de final. Una cosa que en principio sonó rara, porque no estaba clasificado como primero y debía ganarle a Inglaterra –la igualdad les servía a estos–, pero le salió bien la movida. Cuidó a sus cracs Eden Hazard, el colorado Kevin de Bruyne y el contundente Romelu Lukaku, y para hoy están frescos. Con las cartas vistas, la decisión de Martínez es acertada; basta repasar los lesionados por fatigas o dolencias musculares producto de lo intenso de cada partido.

Seguramente sean los belgas quienes tomen la iniciativa hoy. Tratarán de adueñarse del balón y hacer lo que más les gusta: cuidarlo, pero con vocación ofensiva. Tienen buena técnica, son rápidos para jugar por abajo y muy fuertes para hacerlo por arriba. Japón no será una selección que se meta atrás. No es su característica, ni siquiera cuando los rivales lo han superado. En el juego aéreo es donde más sufre. No tiene jugadores de buen porte y la cancha de arriba suele darle dolores de cabeza. Pero por abajo, y esto sí es su característica casi desde siempre, es rápido, explota las bandas y trata de atacar con muchos hombres.

El ganador entre belgas y japoneses será rival del que avance entre México y Brasil. Linda historia la de meterse en cuartos de final.