La selección uruguaya de básquetbol fue a Argentina para jugar una ventana con dos partidos correspondientes al grupo B del Clasificatorio para la AmeriCup 2022. Fue buen resumen el celeste: los dirigidos por Rubén Magnano vencieron 97-77 a Paraguay y 74-67 a Panamá.

Como Uruguay venía de dos derrotas ante Brasil, los triunfos fueron importantes para recomponerse en la serie y quedar en el segundo puesto. Con dos fechas por jugarse –en febrero de 2021, aún sin saberse si serán en sede única o en alguno de estos países–, el grupo está casi liquidado: los brasileños mandan con cuatro triunfos en cuatro partidos, celestes y panameños empatan con dos ganados y dos perdidos, mientras que Paraguay cierra con cuatro partidos perdidos, virtualmente eliminado en un grupo del que pasarán los tres primeros. Dicho de otra manera, Brasil, Uruguay y Panamá jugarán la siguiente fase de la AmeriCup.

El equipo dirigido por el cordobés Magnano mostró cosas interesantes. En lo colectivo, sobre todo en el partido con Panamá, Uruguay muy intenso y marcó muy bien. Las ayudas en los cambios de hombres y la carga en la pintura para bajar rebotes fue clave. Kiril Wachsmann y Emiliano Serres –aunque jugó de alero– fueron los mejores en ese aspecto, aunque conviene destacar a la primera línea de marcación celeste: Luciano Parodi, Marcos Cabot, Joaquín Rodríguez y Santiago Vidal.

Las ofensivas fluyeron bien. En el juego con Paraguay la celeste tuvo números buenos y muy buenos –a veces excelentes– desde el tiro exterior. Parodi, Serres y Federico Haller estuvieron impecables en ese partido. Con Panamá, un rival bastante mejor que los paraguayos, fue trascendental lo que hizo Cabot con su tiro. Cada vez que el encuentro se complicaba, el de Malvín aparecía para quebrar los intentos panameños. Además, lo de Wachsmann abajo del aro fue titánico: bajó 11 rebotes y robó tres pelotas.

Crónica de la victoria ante Panamá

El primer cuarto fue parejo. La dinámica se dio con Uruguay mejor en los primeros minutos y, luego, con Panamá reaccionando. En la celeste se destacaron los minutos de Marcos Cabot, viniendo desde el banco, además del buen aprovechamiento de las cortinas indirectas, sobre todo por parte de Fede Haller. La reacción panameña fue por los aciertos de Trevor Gaskins y de Tony Bishop -sacándole mucho jugo a las pérdidas uruguayas, que no fueron pocas-. Se fue Panamá arriba 17-14.

La enorme mejora defensiva de Uruguay fue la causante de que la celeste revirtiera las cosas. Desde atrás, Uruguay jugó de sus mejores versiones. Emiliano Serres y Kiril Wachsmann fueron impasables y bajaron cuanto rebote hubo; Cabot, que se destacó adelante, también fue importante en la defensa en primera línea, igual que Luciano Parodi. En ofensiva, por venir de atrás, Uruguay corrió bien la cancha y puso muchos tantos en transición. Cuando debió pensar en media cancha las elecciones de tiro fueron buenas y eso se fue notando en el marcador, que terminó 41-27 para la celeste. Más claro: mientras Uruguay metió 27 unidades sólo dejó hacer 10 a Panamá.

Una sucesión de malas decisiones y tiros errados de Uruguay despertó a Panamá. Los centroamericanos aprovecharon eso en ofensiva, metieron un parcial 7-0 y se pusieron rápidamente en partido. La ineficacia ofensiva fue la gran cruz de la celeste. Apenas pudo meter 10 puntos y Panamá descontó hasta quedar a 6, 45-51

Lo de Parodi, conductor natural de la selección, había sido básicamente defensivo. Siguió marcando bien, pero en el arranque del último cuarto se le abrió el aro. Luciano puso triple y doble en dos jugadas seguidas, después fue certero desde la línea del personal y Uruguay volvió a tomar diferencias de 10 o más puntos. Desde ahí la celeste administró bien la diferencia, sobre todo cuando Panamá presionó en el final.

Buena victoria de Uruguay, que deja muchos rendimientos individuales para analizar proyectándolos a futuro, lo mismo que en lo colectivo.

Detalles

Uruguay 74 (14+27+10+23): Luciano Parodi 14, Joaquín Rodríguez 6, Emiliano Serres 1, Federico Haller 13 y Kiril Wachsmann 6 (quinteto inicial); Marcos Cabot 17, Martín Rojas, Nicolás Borsellino 7, Santiago Vidal 6, Theo Metzger 2. Entrenador: Rubén Magnano.

Panamá 67 (17+10+18+22): Trevor Gaskins 17, Tony Bishop Jr. 13, Eugenio Luzcando 9, Akil Mitchell 5 y Ernesto Oglivie 9 (quinteto inicial); Josimar Ayarza 2, Tyler Gaskins 5, Carlos Rodríguez 4, Jamaal Levy 3. Entrenador: José Gómez.