Con goles de Thiago Borbas y Marcos Montiel, River Plate se reencontró con la victoria. Fue 2-0 ante Albion en Jardines, tres puntos que lo ponen al darsenero como puntero del Torneo Clausura.

La octava fecha le planteó un objetivo muy claro al equipo del Chavo Gustavo Díaz: ganar. Eso que supo hacer en las primeras seis jornadas del torneo se había cortado la fecha pasada, cuando River cayó ante Defensor en el Saroldi. Ese resultado los dejó con el mismo puntaje que Nacional, equipo que lo escoltaba prácticamente desde el comienzo del Clausura.

Con el triunfo como requisito, River volvió a ser River en la cancha y, por ende, en el resultado. Eso sí, le costó un tiempo entero, algo que no fue nuevo, porque en lo que va de la competencia la dársena ganó de todas las maneras posibles. En esta ocasión el triunfo se dio por lo hecho en el complemento.

El rival dio pelea porque tenía el mismo objetivo. “Hay que ganar, hoy Albion se juega todo”, dijo un hincha pionero en la tribuna de Jardines del Hipódromo. Sucede que los leones chequean la tabla del descenso, donde están terceros contando desde abajo hacia arriba. Sólo superan a Rentistas y al más complicado: Cerrito.

Por encima de Albion está Cerro Largo, equipo al que se enfrentan en la próxima fecha, y por eso era tan necesario ganar, porque si los melenses superan a Defensor el jueves, Albion se complica aún más.

El viento que todo empuja

“Presiono rápido y desde afuera”, indicó el profesor darsenero en el calentamiento previo al partido, mostrando cómo hacer uno de los ejercicios. Paradójicamente, esa fue la estrategia para ganarle a Albion: en el segundo tiempo los albirrojos salían presionando constantemente, y así llegaron las jugadas más peligrosas.

Pero antes, transcurrieron los primeros 45, en los que la cuestión fue relativamente pareja, sobre todo al principio. El primero en llegar fue el local. Albion intentó en dos ocasiones, primero Correa y después Maximiliano Callorda, mientras que River recién llegó faltando cinco minutos para el complemento, y fue el travesaño el que ahogó el primer grito de gol de la tarde.

Las hojas de las palmeras del María Mincheff de Lazaroff se movieron al ritmo de “vamos, River, vamos, ponga huevo que ganamos”, el cántico que entonaron los cientos de hinchas darseneros que dejaron sus actividades de lado para seguir al club de sus amores, porque saben que se lo merece.

River respondió, estaba siendo más y merecía el gol cuando llegó. El marcador se abrió por obra de Borbas a los 50. Otro más para el delantero que surgió en el club Zorzal del Cerro y que creció en River, que hoy con 20 años de edad es el máximo artillero del Campeonato Uruguayo. “Rápido, potente y de buena pegada”, esos adjetivos que lo describen también reseñan el gol que convirtió en esta ocasión. Borbas recibió el centro de Pablo López, le ganó en velocidad a su marcador, y puso el 1-0 de volea.

Para consolidar la victoria fue Marcos Montiel quien, asistido por Ramiro Cristóbal, con un remate desde lejos, aportó el segundo gol a los 68'.

Y así River volvió a ser River, un equipo sólido y con ideas, que prácticamente sólo sabe de victorias, que va por todo en este campeonato y que tiene por delante su partido más importante: se medirá con el Nacional de Luis Suárez, su rival directo a estas alturas del campeonato.