Teros: misión mundial es la serie que relata una jornada en la que la selección de rugby de Uruguay, Los Teros, atravesó por una serie de actividades militares en el Batallón de Paracaidistas 14. El objetivo era intensificar el trabajo en equipo, la confianza, la camaradería y el liderazgo. Más allá de que el entrenamiento no fuera estrictamente deportivo, los resultados se evaluarán en el camino por París 2024.

Soldado y jugador

“¿Son ustedes la mejor selección de rugby del mundo?”, cuestiona el subdirector del centro de instrucción de paracaidistas y operaciones especiales del Ejército en los primeros minutos del encuentro entre ambas instituciones. Nadie responde. “No somos coaches, no somos psicólogos, pero sí tenemos una metodología de trabajo y entrenamiento, y se las queremos compartir para que ustedes vean qué les sirve y qué no”, prosiguió.

La idea era “que se metieran en la vida dentro del comando por un día y eso funcionó tal cual desde el inicio”, comentó en la serie Guillermo Selves, preparador físico de Los Teros, que añadió que a los jugadores se les anunció que iban a un campamento y que llevaran materiales como para ese evento.

En la serie se muestran desde entrenamientos típicos dentro del complejo militar hasta corridas con escenarios de guerra construidos por tierra, agua y aire. Esteban Meneses, director técnico de la selección uruguaya de rugby, dijo en la serie que “Los Teros en ese momento eran soldados”.

Santiago Civetta, tercera línea y capitán de Los Teros, explicó: “Nos introdujeron su ideología, el accionar de los comandos y del Ejército. Nos lo fueron planteando en esa primera charla, no hubo lugar al chistecito, hubo que ejecutar rápido”.

Uniformados como militares, pasaron por guardias nocturnas, saltos, desafíos físicos y mentales bajo la guía de algunos instructores del batallón. Manuel Ardao, uno de Los Teros que juega de tercera línea, relató que “la forma en la que se dirigían a nosotros era súper formal, estricta, y eso nos abrió los ojos”.

La experiencia institucional

Desde el Batallón 14, el coronel Ignacio Martínez detalló a la diaria que fue una iniciativa de la Unión de Rugby del Uruguay. Tuvieron un contacto con un exoficial de la unidad en el que le plantearon que tenían intención de cara a la preparación para el Mundial de hacer alguna actividad de este tipo.

“No lo habíamos hecho nunca y no teníamos pensado nada, surgió de ellos, y después de que se estudió y se aceptó la propuesta lo diseñamos. Fue una jornada entera, un poquito más de 24 horas, llegaron al mediodía el viernes y el sábado al mediodía ya estábamos terminando”, narró el coronel.

Desarrollaron un programa de actividades en base a los entrenamientos normales del comando, adaptado a “lo que ellos querían desarrollar, que era el liderazgo, la unión de equipo, la disciplina, la capacidad de poder empujar un poco más del límite”, explicó Martínez.

Foto del artículo 'Teros: misión Mundial, el documental de la preparación militar de los Teros rumbo a Francia'

Como se explica en el documental, “es importante salir un poco de lo individual y lo que nos da esa uniformidad, esa conciencia de equipo y de grupo es estar todos uniformados con el mismo equipo. Las individualidades quedan de lado”, coincidió el militar, por lo que fundamentó que los jugadores se vistieran como soldados aunque admitió que “la camiseta de la selección es también un uniforme”.

“Un montón de actividades no fueron físicamente exigentes para ellos porque son deportistas de alto rendimiento, deportistas profesionales, pero son desafiantes individualmente y en equipo se logran más fácilmente”, valoró.

En esos momentos aflora el liderazgo y, aunque exista un líder formal como puede ser el capitán, en las diferentes actividades se descubren nuevos líderes que se hacen cargo.

Para el Batallón 14 fue un reconocimiento muy importante, según el coronel, “porque una selección nacional que va a representar al país en un Mundial recurrió a nosotros para poder fortalecer estos aspectos, porque reconocieron esas capacidades que tenemos”.

Es la primera vez que hacen algo de esta índole, aunque es común que desde las instituciones militares se apoye a los deportes en alojamiento por un torneo en particular o en aspectos logísticos, pero no tanto en entrenamiento.

Comunicar la guerra y la cancha

Atacar, vencer, derrotar, lastimar, vulnerar, doblegar, superar, dominar y avasallar. Parte del lenguaje del periodismo deportivo se asienta en términos que tienen orígenes y tonos bélicos, que asemejan la cancha a un enfrentamiento más que deportivo.

“Entiendo que los términos que se utilizan como ‘enfrentamiento’ o ‘el rival’ en un ámbito deportivo es porque lo podemos expresar o representar de esa forma, es un enfrentamiento que no tiene por qué ser bélico, sino por obtener la victoria, o es contra uno mismo, para dar lo mejor, independientemente del resultado”, argumentó el militar.

“Creo que hay algunos puntos de contacto entre el entrenamiento deportivo y el entrenamiento militar. Particularmente, en el desarrollo del liderazgo, más que nada en los deportes colectivos”, reflexionó Martínez, y destacó que “hay valores que nosotros pregonamos como la humildad y el patriotismo, ahí nos sentimos identificados”.

En varios deportes, principalmente en el fútbol, se utilizan metáforas bélicas. De hecho, en la Pontificia Universidad Javeriana de Bogotá, Juan Cáceres Moya dedicó su trabajo final de grado a “Las metáforas bélicas del fútbol: un fenómeno cultural y discursivo”.

Para Cáceres, que se asienta en la hipótesis de que “el fútbol es una guerra”, quienes lo relatan “se valen metafóricamente del concepto de combate/guerra, en donde hay algo que ganar y que perder”. Y esto no es inocente ni sin intención, puesto que “los diferentes lenguajes son a la vez vehículo de cultura y producto cultural, por eso el conflicto bélico nos condiciona y al mismo tiempo usamos metáforas de guerra para referirnos al deporte del fútbol”.

Foto del artículo 'Teros: misión Mundial, el documental de la preparación militar de los Teros rumbo a Francia'

En su trabajo se analizan algunos términos y expresiones bélicas del fútbol como retaguardia, rivales, héroes, artillero, puntero, capitán, zona de peligro, cancerbero, maniobra, posición de tiro, disparo, cañonazo, fusilar, embestir, rematar, invadir, más que cotidianas en los relatos orales y escritos de crónicas deportivas.

Por la misma línea, en un simple esquema que se puede ajustar a cada deporte, Cáceres resume que “las metáforas estructurales se podrían expresar lingüísticamente” como que “el deporte es una contienda (pelea, lucha, competencia, disputa), la pelota es un proyectil (bala, cohete, granada, misil), los jugadores son guerreros (una escuadra, soldados, el equipo) y los contrarios son enemigos (oponentes, contrincantes)”.

Retirada

El gran objetivo es hacer historia al ganarle a Italia y Namibia, según expresa el DT en el documental. Los Teros debutarán el 14 de setiembre con Francia, el local, continuarán ante Italia el 20, el 27 jugarán frente a Namibia y culminarán la fase de grupos ante a los renombrados All Blacks de Nueva Zelanda.

“A partir de ahora, siempre que yo les diga ‘Teros’, ustedes van a responder con el nombre de la patria”, comienza el segundo episodio del documental, que dura una hora y se puede ver en Star+.

Instructor: “Teros”.

Teros: “Uruguay”.

Instructor: “Teros”.

Teros: “Uruguay”.

“¿Son ustedes la mejor selección de rugby del mundo?”, cuestiona nuevamente el instructor. “Sí, instructor”, responden al unísono Los Teros esta vez. Ese grito cierra ahora cada entrenamiento de la selección uruguaya de rugby.

Lo imposible

El Mundial de rugby comienza el viernes 8 de setiembre y se disputará en Francia. Uruguay, que tiene libre en la primera fecha del grupo que integra, jugará su quinta Copa del Mundo desde 1999, y además en la cita francesa tendrá su tercera participación consecutiva. La otra marca significativa de Los Teros en este Mundial es que hace ya dos años consiguieron por primera vez la clasificación directa luego de ganar ante Estados Unidos el cupo Américas 1.

Los Teros jugarán en el grupo A y tendrán como rivales a los All Blacks de Nueva Zelanda, Francia, Italia y Namibia, selecciones de inmensa jerarquía, a excepción de los africanos, que a pesar de ser de los mejores XV de su continente no tienen un nivel relevante a nivel mundial.

Uruguay tiene libre en la primera fecha, y por tanto en la primera semana de competición; debutará el jueves 14 de setiembre nada menos que con los poderosos locales, Francia, en la ciudad de Lille. El segundo partido será seis días después en Niza frente a la selección italiana, el miércoles 20 de setiembre; después, el miércoles 27, el XV oriental enfrentará a Namibia en Lyon, y cerrará el grupo el 5 de octubre ante los poderosísimos All Blacks de Nueva Zelanda, de nuevo en Lyon.

Los 33 seleccionados elegidos por el entrenador Esteban Meneses son: Felipe Aliaga, Diego Arbelo, Manuel Ardao, Matías Benítez, Lucas Bianchi, Santiago Civetta, Carlos Deus, Manuel Diana, Eric Dosantos, Ignacio Dotti, Facundo Gattas, German Kessler, Manuel Leindekar, Ignacio Peculo, Reinaldo Piussi, Guillermo Pujadas, Juan Manuel Rodríguez, Mateo Sanguinetti.

Juan Manuel Alonso, Santiago Álvarez, Baltazar Amaya, Santiago Arata, Felipe Arcos Pérez, Bautista Basso, Felipe Berchesi, Felipe Etcheverry, Ignacio Facciolo, Nicolás Freitas, Tomás Inciarte, Gastón Mieres, Agustín Ormaechea, Rodrigo Silva, Andrés Vilaseca.

El Mundial tiene 20 selecciones separadas en cuatro grupos de cinco, de los que habrán de pasar a cuartos de final primero y segundo de cada serie; después habrá semifinales y final. Además del grupo A de Uruguay, en el B están Sudáfrica, Irlanda, Escocia, Tonga y Rumanía; en el C Gales, Australia, Fiji, Georgia y Portugal, y en el D Inglaterra, Japón, Argentina, Samoa y Chile.

El partido inaugural será el fabuloso Francia-Nueva Zelanda en el Stade de France, y la disputa continuará con partidos de la fase de grupos hasta el 8 de octubre, cuando se conozca a los ocho cuartofinalistas.