El británico Lando Norris consiguió su primera victoria en Fórmula 1 este domingo en el Gran Premio de Miami. Había estado cerca de lograrlo en Rusia en 2021, cuando venía en punta hasta que arreció la lluvia y su falta de experiencia le impidió entrar a tiempo a cambiar gomas.

Esta vez, en cambio, fue favorecido por la entrada a boxes. Un accidente entre Magnussen y el locatario Will Sargeant obligó a la entrada del auto de seguridad, lo que permitió que Norris, que era el único de los punteros que todavía no había entrado por neumáticos nuevos, aprovechara para hacerlo. Quedó primero, aunque Max Verstappen, que había punteado cada sesión de clasificación y había ganado la carrera sprint de sábado, estaba detrás de él, pronto para dar el zarpazo y retomar el liderazgo. Pero eso no ocurrió; al contrario, el McLaren de Norris comenzó a alejarse del Red Bull del tricampeón, lo que termina de demostrar la buena forma del equipo británico, que también vio brillar a su otro piloto, el australiano Oscar Piastri, hasta que un toque con el ferrarista Carlos Sainz dañó su auto.

Detrás de Norris y Verstappen llegó Charles Leclerc, de Ferrari, que había sido quien había estado más cerca de molestar al campeón en las sesiones previas, pero que en carrera no pudo acercarse jamás a él. Luego llegaron Sainz, el cada vez más desenfocado Sergio Pérez en el segundo Red Bull, Lewis Hamilton, Yuki Tsunoda, George Russell, Fernando Alonso y Esteban Ocon.

El retorno a la punta de McLaren, que había tenido una victoria aislada hace tres años en Monza, le pone condimento a un campeonato que sigue liderando cómodamente Verstappen, pero que muestra desarollos interesantes de parte de otros equipos. Esta carrera, además, marcó los 30 años de la muerte de Ayrton Senna, el gran piloto brasileño que logró sus tres campeonatos a bordo de un McLaren. Por estos días, además, Netflix anunció el estreno de una miniserie sobre su vida.