Siguen bajando los trabajadores en seguro de desempleo

El número de beneficiarios del seguro de desempleo volvió a descender –por séptimo mes– durante diciembre, ubicándose en 46.212. Esto representa una caída de 3,1% (1.483 personas) en relación con noviembre y una contracción de 40,1% si se compara con diciembre de 2020 (33.879 trabajadores).

Según los datos divulgados, fueron 14.682 las personas que salieron del seguro de paro entre noviembre y diciembre: 70,7% salieron por reincorporación y 29,3% lo hicieron por despido. Por su parte, durante el último mes del año ingresaron 13.199 trabajadores: 6.249 por reducción o suspensión (47,3%) y 6.950 por despido (52,7%).

Por sectores, la caída es bastante generalizada, con la excepción del sector agropecuario, la construcción y la enseñanza, que exhibieron un leve aumento asociado –principalmente– a factores estacionales.

De acuerdo a los datos por causal del observatorio del BPS, 55,1% (25.465) de la caída corresponde a despido, mientras que 13,2% (6.098) y 31,7% (14.649) corresponden a reducción y suspensión, respectivamente. Si se desagrega la información por edades, el grupo con mayor presencia dentro del universo de beneficiarios es el de 30 a 39 años (25%), seguido de cerca por la población de entre 40 a 49 años (23%) y por aquella que se encuentra comprendida en la franja de 50 a 59 años (23%). Del total de trabajadores en seguro de paro, 40,3% son mujeres y el restante 59,7%, hombres. El sector con mayor cantidad de personas en seguro de desempleo es el comercio (7.783), seguido por la construcción (5.953), la industria (5.749) y el agro (5.514).

Foto del artículo 'Telegramas económicos: panorama local'

En comparación con el promedio de 2019 (prepandemia), al cierre del año había cerca de 850 beneficiarios más. Sin embargo, al analizar las variaciones por sectores de actividad, la caída de las personas en seguro de paro se concentró principalmente en industria y construcción. En el caso del primero, eran casi 5.750 los beneficiarios a diciembre de 2021, 37% menos respecto al umbral de referencia prepandémico (9.098). En el caso del segundo, la caída observada durante esa ventana de tiempo fue de 12%, en tanto las personas en seguro de paro bajaron de 6.768 a 5.953. Por su parte, el sector comercial terminó el año con cifras empatadas: 7.893 (promedio 2019) y 7.783 (diciembre de 2021).

En contraposición, el número de beneficiarios del seguro de desempleo es significativamente más elevado respecto del nivel prepandemia en varios servicios. Por ejemplo, en el caso de arte, entretenimiento y recreación, hay más del doble de personas en seguro de paro (798) de las que había si se considera el conjunto de 2019 (364); la variación asciende a 119%. Algo similar sucede con enseñanza: había 858 trabajadores y ahora hay 3.181 (+106%). Con una diferencia importante, pero menor que las dos anteriores, aparecen alojamiento y servicios de comida (+56%) y actividades administrativas y servicios de apoyo (+53%). De esta manera, si bien los números agregados muestran que el universo de beneficiarios del seguro de paro es similar en tamaño al de 2019, las realidades sectoriales son muy distintas y desnudan la asimetría de la recuperación dentro de la órbita del empleo formal.

La demanda laboral en 2021: una aproximación alternativa

De acuerdo al Monitor Laboral de la consultora Advice, que releva los llamados que se realizan desde los principales portales digitales de nuestro país, la demanda laboral aumentó 11% entre diciembre y noviembre; fueron 3.571 las oportunidades laborales ofrecidas durante el último mes del año. Esto pautó, en términos interanuales, un incremento de 119%. El sector que concentró la mayor cantidad de propuestas en diciembre fue el de la tecnología, con 677 llamados que representan 19% del total. El dinamismo del sector eleva un 247% las oportunidades generadas cuando se compara con el mismo mes del año anterior. Le siguieron el sector comercio (457 oportunidades de empleo, 13% del total) y finanzas (301 propuestas, 8% del total).

Foto del artículo 'Telegramas económicos: panorama local'

En términos acumulados, 2021 contabilizó 34.630 oportunidades de trabajo publicadas en todos los portales digitales, lo que supone un incremento de 72% frente al acumulado de 2020 (con un aumento anual equivalente a 138%). Como era de esperarse, el sector de la tecnología lideró la demanda laboral durante el segundo año de la pandemia, generando 1 de cada 5 oportunidades nuevas. En segundo y tercer lugar emergen comercio (14% del total) y finanzas (8%). Además de tecnología, los otros dos sectores de actividad con mayor dinamismo anual fueron comunicación-marketing y turismo: 99% y 83%, respectivamente. En ese sentido, vale destacar que todas las ramas de actividad mejoraron su posicionamiento en términos de demanda de empleo entre 2020 y 2021 y la que menos demandó, que fue salud, igualmente incrementó su oferta en 30%.

Dentro de la órbita del sector público, que recoge los llamados del portal Uruguay Concursa, fueron 3.289 las publicaciones en el total del año. Educación y salud son los dos sectores que, por lejos, lideran la demanda laboral: entre ambos concentran 58% de los llamados totales. Puntualmente, 31% corresponden al primer sector y 27% al segundo. Dentro de educación las instituciones que destacaron fueron Udelar (84%) y UTEC (6%), y dentro de salud fueron ASSE (71%) y Udelar (26%).

Las expectativas de los analistas en enero

Según el relevamiento realizado por el Banco Central del Uruguay (BCU) entre 24 instituciones y profesionales independientes, la economía uruguaya cerraría 2021 con un crecimiento de 4,2% –dato que conoceremos en marzo– y se expandiría 3,2% y 2,8% este año y el que viene, respectivamente (según la mediana de las respuestas). Las opiniones respecto al desempeño esperado para 2022 varían entre 2,5% (mínimo) y 4,5% (máximo). En relación con la encuesta anterior, las expectativas mejoran para 2021 (dos décimas) y para 2022 (1 décima), y se mantienen relativamente estables para 2023.

Por otro lado, el relevamiento de expectativas de inflación arrojó una leve corrección al alza en relación con la encuesta correspondiente a diciembre, a pesar de la decisión del BCU de aumentar la tasa de interés (en 75 puntos básicos hasta 6,5%) y de sus anuncios respecto a las subas adicionales que tendrán lugar en los próximos meses.

En concreto, la inflación se ubicaría este año en 7,0% (una décima por encima de las predicciones anteriores) y sería 6,6% y 6,2% en 2023 y 2024, respectivamente (en todos los casos se considera la mediana de las respuestas y no el promedio). De esta manera, la visión de los analistas continúa distanciándose de la previsión oficial contemplada en la Rendición de Cuentas, que ubica la inflación en 5,8%, 4,7% y 3,7% durante los próximos tres años.