Triunfazo del equipo de Diego López en una tarde que se puso brava. Peñarol visitó la Curva de Maroñas y le ganó a Danubio 2-0, con un golazo del goleador del Torneo Clausura, Gabriel Fernández, y otro de Fabricio Formiliano. Las dos anotaciones llegaron en la segunda etapa del juego, a los 58 y 75 minutos. Primero apareció Fernández: recibió una habilitación perfecta del capitán Cristian Rodríguez y le rompió el arco a Facundo Silva; después, luego de un avance del Cebolla por la izquierda y una falta que le hicieron, llegó un centro de Lucas Hernández que Silva salió a cortar a medias y Formiliano pudo empujar con una volea. Faltaba poco y la tarde se cerraba, pero antes de todo eso la parada había sido muy difícil para Peñarol.

Danubio empezó mejor y manejó las acciones ofensivas del partido, sobre todo en la primera parte, cuando llegó el momento clave. A veces los cuadros demuestran que están bien cuando tienen que levantarse ante la adversidad. El momento aurinegro es el mejor del año, porque con la victoria estiró la diferencia respecto de Nacional y Wanderers en el Clausura (seis y siete puntos, respectivamente), pero por sobre todas las cosas pudo, por primera vez en muchísimo tiempo, ser el dueño de la Anual (superó a los tricolores por una unidad). ¿El momento bisagra del partido? El avance de Ignacio González y la expulsión de Kevin Dawson, que salió a cortar lejos de su arco y vio la tarjeta roja –además, en otras instancias hubo un par de faltas, sobre todo un agarrón de Guzmán Pereira que podría haber sido penal–. Salió un coloniense y entró a la cancha un sabalero, porque se generó el debut en esta temporada de Thiago Cardozo, que ingresó por el argentino Lucas Viatri. Bien el chiquilín de Juan Lacaze: entró en una parte difícil de la tarde y cumplió. Danubio no supo aprovechar la ventaja de futbolistas en la cancha ni la parte izquierda de la cancha, donde con Camargo y Leandro Sosa había atacado con frecuencia a Ezequiel Busquets, tal vez en su tarde más floja. O, más bien, Peñarol pegó en el momento justo: cuando estás derecho, estás derecho.

Ni la entrada de Jorge Graví ni la de Federico Rodríguez lograron enderezar el partido para la franja, que sigue tercero en la Anual, pero muy lejos en el Clausura, que empieza a ponerse de color amarillo y negro. Falta mucho, pero para Peñarol el primer paso está dado: ser líder con ventaja del campeonato y tomar la posta de la Anual. Además, ya hace semanas que encontró un terrible goleador, Gabriel Fernández.