La reaparición del director técnico floridense, tras nueve meses de inactividad, estuvo acorde con el refrán sobre el entrenador que debuta y significó una lavada de cara que para los de la Aduana era imperiosa. River Plate ganó bien; fue contundente y supo manejar los hilos de un partido cambiante. Por su parte, Fénix sigue hundido y no levanta cabeza: lleva cinco derrotas consecutivas y el descenso lo está acogotando.

Los de Jorge Giordano formaron con un 4-2-3-1 que, por momentos, pasaba a ser 4-3-3. El equipo se mostró ordenado, intentó jugar y se replegó cuando tuvo que hacerlo. De arranque, Facundo Ospitaleche tuvo la suya tras una divina jugada, pero pasó cerca. Luego fue el propio volante el que se mandó por la izquierda y lanzó un centro rastrero que conectó Juan Manuel Olivera en la zona del chocolate. El gol abrió la cuenta, pero la alegría no duró nada. Un remate a distancia de Andrés Barboza puso en aprietos a Nicola Pérez. El golero respondió en primera instancia, pero dio rebote y, en el camino, Emiliano Mozzone los madrugó a todos y puso el empate.

Bien, Tito, bien

El complemento arrancó intenso, pero una acción de juego rápida marcó el trámite. Roberto Fernández le entró duro a un rival y vio la segunda amarilla. River fue rápido de cabeza y supo leer la tarde para comenzar a sacar provecho. Llegó por afuera, sorprendió al rival y encontró a un efectivo Tito Luis Urruti, que fue fundamental. El primer gol del delantero de Conchillas llegó tras una maniobra personal muy buena por la derecha en la que, al entrar al área, castigó con un bombazo cruzado que fue inatajable para Denis.

Con el partido a cuestas, Carrasco se vio obligado a ir a buscar el resultado, por lo que movió piezas. Entraron Leonardo Fernández y el brasileño Breno en busca de velocidad y contragolpes rápidos que comenzaron a aparecer; como contrapartida, eso dejó espacios en el fondo albivioleta. Los de Giordano se cerraron y buscaron llegar en bloque, y así cayó el segundo. Pase filtrado para Urruti, que esta vez entró al área con el balón dominado, eludió a Darío Denis y puso el tercero. Despegado.