El inmenso Maracaná recibirá este martes a las selecciones de Bolivia y de Perú, dos equipos parejos que se enfrentarán con una consigna clara de por medio: ganar los tres puntos y mejorar las chances de pasar a la segunda ronda de la Copa América. Por puntos y por lo visto en la cancha, el que llega mejor es Perú. Más allá de que la distancia es un solo punto, el desempeño de los peruanos fue mejor que el de los bolivianos, aunque en el análisis no puede dejar de tenerse en cuenta cuáles fueron sus respectivos rivales.

Bolivia va a ser otro equipo. Seguramente el planteamiento del entrenador, Eduardo Villegas, no sea tan marcado a la defensiva como con Brasil. Más allá de la derrota 3-0 con los norteños, lo visto en el primer tiempo le da una sensación buena a Bolivia, que refuerza los conceptos de marca propuestos. Claro que ahora, por el contrario, deberá demostrarse que sí puede hacer la otra parte del plan: ofender.

Perú quedó con la espina clavada por no haber podido aprovechar la superioridad numérica en el final del encuentro con Venezuela. Quiso ganar pero no pudo: naufragó con centros y tiros mal ejecutados, cuando no terminó en las manos del buen arquero vinotinto Wilker Fariñez. Es muy probable que el director técnico, el argentino Ricardo Gareca, ensaye variantes para el encuentro. Una puede ser por Yosimar Yotún, según cómo haya evolucionado el volante tras la dolencia que lo sacó de la cancha en el partido con los venezolanos. Andy Polo, Raúl Ruidíaz y André Carrillo son los nombres que pueden sustituirlo, en cualquiera de los casos de acuerdo con el ordenamiento táctico que el entrenador elija para el arranque.