Con la despedida de Estados Unidos a manos de Francia, el título de campeón mundial tendrá nuevo dueño. Galos, argentinos, australianos y españoles sueñan en grande tras la caída de los yanquis, ganadores de los últimos dos torneos, Turquía 2010 –dream team que tuvo a Stephen Curry, Kevin Durant y Russell Westbrook como figuras– y España 2014 –otro cuadrazo con Curry, Kyrie Irving, James Hardem, Kaly Thompson y Anthony Davis, entre otros–. Las selecciones de Argentina y España van por su segundo título mundial. Para Francia y Australia es una hermosa chance de entrar en la historia grande del básquetbol. Los cruces para el viernes son Australia-España (a las 5.00 de nuestros relojes) y Argentina-Francia (a las 9.00).

Australianos y españoles llegan invictos después de seis partidos. Hay tremendos planteles de ambos lados. En los de Oceanía se destaca Patty Mills, que con 22,2 puntos por partido es el máximo anotador de los que quedan en camino. El base de San Antonio Spurs ha sido la figura determinante, siempre con las últimas bolas cuando los partidos se definen apretados. Joe Ingles y Aron Baynes son sus otros pilares, aunque dependiendo de las instancias de los juegos han aparecido Andrew Bogut, Matthew Dellavedova, Mitch Creek y David Barlow.

España es la mezcla justa de experiencia y jóvenes valores. Ricky Rubio manda desde la base, Rudy Fernández y Sergio Llull son aleros que rompen partidos, Marc Gasol es clave en el juego interno. Pero, a ellos, todos curtidos en experiencias mundialistas y olímpicas, se suman los jóvenes en ascenso: los hermanos Hernangómez, Willy y Juancho, más Pierre Oriola, quien ha mejorado su rendimiento año tras año en el Barcelona catalán.

Se presume que Australia-España será un partidazo, así como Argentina-Francia. Los albicelestes son el restante equipo invicto y vienen de la resonante victoria sobre Serbia. Tal vez haya sido el partido más importante del último tiempo para Argentina, por más que la historia se reedita y ahora, mañana, hay otro más importante. Haberle ganado a uno de los máximos candidatos al título es un envión anímico enorme. Luis Scola y Facundo Campazzo fueron los mejores en ese último juego, pero no hay que quedarse ahí. Argentina gana en cohesión grupal mucho antes de citar a Nicolás Laprovittola, Marcos Delia, Gabriel Deck o Patricio Garino.

Para hablar de Francia no es necesario fundamentar desde su condición de invicto que no tiene. Los galos han hecho un campeonato fenomenal: le ganaron a Alemania y a Lituania, además de imponerse ante los yanquis. Un cuadrazo, lisa y llanamente, con Evan Fournier, Frank Ntilikina, Nando de Colo, Nicolás Batum y Rudy Gobert como valores más destacados.