Fue el 11 de marzo: en Inglaterra, tras la oleada de casos en el inicio europeo de la pandemia de covid-19, se canceló el fútbol. Vuelta va, vuelta viene, los clubes, los jugadores –no todos, algunos fueron muy críticos– y The Football Association, junto con la Premier League, resolvieron que los pingos se verían en la cancha: la temporada termina o termina; los descensos, las clasificaciones a las copas internacionales y el esperadísimo título para Liverpool (30 años después de su última consagración a nivel local) se definirían con la totalidad de los partidos jugados. En síntesis: el 17 de junio, 100 días después del último partido, la pelota vuelve a rodar en Inglaterra.

“Nos pusimos de acuerdo”, declaró el dirigente de la Premier League, Richard Masters, en un comunicado. “Esa fecha no puede ser confirmada hasta que hayamos cumplido todas las condiciones en términos de seguridad, porque la salud y el bienestar de todos los participantes y de los hinchas es nuestra prioridad”, dijeron, sin embargo, desde la organización del fútbol inglés. La fecha número 30 del campeonato se jugará el fin de semana del 19 al 21 de junio; antes, el miércoles 17, habrá dos encuentros para poner al día la competición: Manchester City-Arsenal (con Lucas Torreira recuperado) y Aston Villa-Sheffield United. Además del final de la temporada, se sabe que el 8 de agosto se disputará la final de la Copa FA. De esta manera, Inglaterra se suma a Alemania (la Bundesliga volvió el 16 de mayo) y a España, que anunció la reanudación de su liga para el 8 de junio.

Con acento scouse

Las etapas que faltan para el final tienen un solo objetivo para muchos: saber en qué momento será campeón Liverpool. Los reds, dirigidos por el alemán Jürgen Klopp, lideran la Premier con 25 puntos de ventaja sobre el segundo en cuestión, Manchester City. En el condado de Merseyside habrá fiesta –por lo menos de buena parte de la ciudad, porque los de Everton mirarán de lejos–. Si bien Liverpool festejó a nivel internacional en varias ocasiones (Champions League 2005 y 2019, Copa UEFA 2001, Supercopa de Europa 2001, 2005 y 2019, y Mundial de Clubes 2019), desde 1990 no logra dar la vuelta olímpica a nivel local.

Aquel equipo de Kenny Dalglish –leyenda del club, entrenador-jugador– se quedó con la penúltima Liga Inglesa, que luego pasó a llamarse Premier League. Lo que se buscaba era aumentar los ingresos. La Premier pasaría a negociar con cierta independencia de la Football Association sus propios acuerdos comerciales de radio, televisión y patrocinio. Los clubes consideraban que los ingresos adicionales les permitirían competir a la par de otros equipos europeos en los torneos internacionales. De ahí en más, el fútbol inglés pasó a ser uno de los más fuertes del mundo. Entre la copa de 1990 y la de 2020 que ganará en unos días, Liverpool estuvo muy cerca de ser campeón en 2014, pero quedó a dos puntos del City. Aquella vez Luis Suárez se perdió diez partidos en la recta final del torneo. El salteño –la gran figura del equipo– fue suspendido por morder al defensor de Chelsea Branislav Ivanović. ¿Sale un pasaje low cost de Barcelona a Liverpool para levantar la copa?