Sofie Svava es jugadora de la selección de Dinamarca y hasta ahora defendía a Wolfsburgo de Alemania, pero concretó la transferencia más cara en la historia del fútbol femenino español al ser traspasada a Real Madrid por 80.000 euros. Su pase superó al de Ángela Sosa, por la que Betis pagó 60.000 euros a Atlético Madrid en 2020.

La futbolista danesa de 21 años ha jugado como lateral, mediocampista y extrema izquierda. Ganó una Copa de Dinamarca, una Liga de Suecia, una Copa de Suecia y una Copa de Alemania.

Debutó en Hørsholms HUI en 2006 y en 2010 pasó a Bøndby hasta 2013, cuando jugó en B93 durante una temporada y al año siguiente vistió la camiseta de Ballerup BSF por dos años. Luego retornó a Brøndby y jugó en FC Rosengård y en Wolfsburgo, donde en la última temporada disputó 24 partidos, nueve como titular, y desde donde emigró a Real Madrid.

El equipo dirigido por Alberto Toril estuvo activo en cuanto a altas y bajas durante el mercado invernal y sumó a Sofie a su plantel como refuerzo de los puestos que ocupan Athenea del Castillo, Olga García o Caroline Möller.

Datos de la inequidad

El fichaje femenino más caro del mundo fue el de Pernille Hardel, vendida de Wolfsburgo l Chelsea de Inglaterra por 350.000 euros en 2020.

La brecha entre el fútbol femenino y el masculino es enorme. El fichaje más caro de la historia del fútbol fue el de Neymar en 2017, cuando pasó de Barcelona a Paris Saint-Germain por 222 millones de euros, seguido por el de Kylian Mbappé de Mónaco a Paris Saint-Germain en 2018 por 145 millones de euros, y el de Philippe Coutinho de Liverpool a Barcelona en 2018 por 135 millones de euros.

El fútbol femenino vende

Hace dos días fue noticia que en tan sólo tres días de venta, Barcelona lleva colocadas más de 70.000 entradas para el clásico del fútbol femenino español, que se disputará el 30 de marzo por la vuelta de los cuartos de final de la Champions.

Por esta gran respuesta de la afición, el equipo blaugrana habilitó el aforo completo del Camp Nou, apostando a que para la fecha de realización del evento la crisis sanitaria haya mejorado, y por eso en las últimas horas se agotaron las entradas y ya no quedan tickets disponibles para ver el mayor enfrentamiento del fútbol femenino español.

La reserva se habilitó el miércoles pasado y en las primeras 24 horas los socios podían adquirir gratuitamente un máximo de cuatro asientos. A partir del jueves se habilitó la venta para el público en general, con un costo de entre nueve y 15 euros.

“En total, unas 85.000 entradas, después de descontar del máximo aforo posible (99.354 espectadores) las reservadas a compromisos”, publicó el periodista Miki Soria, de Sport.es, en su cuenta de Twitter.

Mientras que en Uruguay y el mundo continúa la lucha social por la equidad de género en el deporte, con la televisación del fútbol femenino como uno de los eslabones principales a transformar, que hace frente a la reiterada excusa de que “el fútbol femenino no vende y por esa razón no hay empresas interesadas en televisarlo”, hechos como este demuestran que el deporte más consumido a nivel mundial vende también en la rama femenina y día a día despierta mayor interés.

Antes del clásico en el Camp Nou del 30 de marzo, se jugará la ida el 22 del mismo mes en Madrid, y este miércoles ambos equipos se enfrentarán por la semifinal de la Supercopa de España, en el primer capítulo de la trilogía que tenemos por delante.