El estadio Centenario presentaba una tribuna parcialmente llena y tres completamente vacías durante la final de la Copa Sudamericana jugada el sábado entre Athletico Paranaense y Bragantino. Desde el Centro de Almaceneros Minoristas, Baristas, Autoservicistas y Afines del Uruguay (Cambadu) reconocieron que la final “prácticamente no movió la aguja”, ya que las ventas fueron normales. Es por esto que desde la gremial pidieron al gobierno que la próxima vez “se esfuerce un poco más y organice la final de la Copa UEFA, porque con unos miles de turistas brasileños claramente nos morimos de hambre”.

En Cambadu confían en que la final de la Copa Libertadores del sábado próximo entre Flamengo y Palmeiras genere mayores ingresos, ya que se espera que haya entre tres y cinco veces más turistas, pero tampoco quieren hacerse demasiadas expectativas. “Por más que en Brasil haya plata, es un país sudamericano. De acá al sábado puede haber un golpe de Estado, un descalabro económico o cualquier otra cosa, y nos quedamos con miles de litros de cerveza de clavo. Si realmente queremos apostar al turismo de finales, tenemos que organizar la Copa UEFA, la Champions League o algo de eso”, opinó un representante de la gremial. “Es más, a mí me está entrando la duda de qué tanto lograríamos vender en caso de que organicemos el Mundial de 2030. En donde nos toque un grupo con Egipto, Honduras y Serbia, con suerte logramos aumentar las ventas un 5%”.