En poco más de un mes se produjeron tres fugas del sistema penitenciario. El 14 de agosto se fugó un preso del Comcar, el miércoles se fugó una mujer que estaba en régimen de prisión domiciliaria en Piriápolis, y ayer nuevamente se fugó un hombre, esta vez del penal fernandino de Las Rosas. El presidente de la República, Luis Lacalle Pou, reconoció que la situación “nos pone muy tristes, porque estamos comprobando que hay muchos presos que no hacen un buen uso de la libertad responsable y perjudican a toda la sociedad”. El mandatario explicó que “todas las políticas de este gobierno tienen como norte la noción de que no hay nada más preciado que la libertad del ser humano. La política carcelaria no es una excepción, por supuesto. La libertad es lo primero. Siempre. Entonces, que nosotros dejemos en libertad a los presos para que se queden o se vayan, y ellos elijan escaparse en lugar de permanecer en prisión para terminar de cumplir su condena, es muy triste. Porque si la libertad responsable falla no sólo va a fallar también el sistema carcelario; la civilización humana va a fallar”.

El mandatario negó tajantemente la posibilidad de implementar algún tipo de restricción al escape de prisioneros. “Para eso habría que establecer un Estado policíaco, y nosotros estamos filosóficamente en contra de este tipo de cosas. No puede ser que papá Estado les tenga que andar diciendo a los presos qué se puede hacer y qué no. Cada uno de ellos sabe lo que tiene que hacer”.