Ayer de mañana comenzaron a circular versiones según las cuales la FIFA había decidido que España, Marruecos y Portugal organizarían el Mundial de 2030, pero el partido inaugural se jugaría en el estadio Centenario. Algunas horas más tarde, sin embargo, la FIFA aclaró que la celebración de los 100 años del primer mundial consistiría solamente en el puntapié inicial del partido inaugural. “La previa va a ser exactamente igual que la de un partido común y corriente. Los dos equipos llegarán al estadio Centenario, calentarán, harán los preparativos, saldrán a la cancha, se llevará a cabo el sorteo y el árbitro dará el pitazo inicial. Pero después del primer toque de balón el partido ingresará en una especie de cuarto intermedio para que los equipos y los jueces se tomen un avión en dirección a la península ibérica y allí, en un estadio de verdad, jugarían el resto”, explicó un directivo de la FIFA. “Lo que buscamos con esto es homenajear a Uruguay por haber alojado el Mundial de 1930, pero sin dejar que el Mundial de 2030 se nos venga abajo por eso”.

El análisis: según los expertos, es la primera vez en la historia que la designación de una sede para el Mundial deja descontentos a tres continentes.