Como cada vez que surge un escándalo que involucra a su partido, el líder cabildante aseguró que el caso que motivó la renuncia de la ahora exministra de Vivienda y Ordenamiento Territorial, Irene Moreira, es “una nueva muestra de la persecución permanente contra Cabildo Abierto”. Pero varios de sus correligionarios consideran que esta estrategia de permanente victimización no es “compatible con el honor militar”. “Nosotros entendemos que a Cabildo se lo trata muy injustamente, pero somos militares, no podemos vivir lloriqueando. Tenemos que pelear. En este caso concreto o damos un buen golpe de Estado y echamos a todos los políticos, como hicimos en el 73, o nos callamos la boca”, opinó un oficial militar retirado que integra Cabildo Abierto. El dirigente recordó que “ningún líder militar importante, desde Alejandro Magno a José Gervasio Artigas, pasando por Julio César o Napoleón, fundó un historial de victorias apelando a un comportamiento pasivo agresivo. Si nuestro general no cambia su estrategia nos vamos a tener que ir con Gustavo Zubía, que piensa igual, pero llora menos”.

La advertencia: “Soy una mujer de Cabildo orgullosamente femenina y por eso no me avergüenza llorar, pero de los hombres de mi partido espero otra cosa”. Mujer cabildante y sensible que viste de rosado pero no quiere que los hombres también lo hagan.