¿Quién conquistó México, si ni México ni España existían como estados nación en 1519? ¿Por qué las sociedades mexicana o argentina deben ser entendidas desde el parámetro del poscolonialismo, y la estadounidense o la canadiense no?
Desde el presidente de México Andrés Manuel López Obrador escribiéndole al rey de España para que pida perdón1, hasta el derribo de las estatuas2, ¿por qué una persona que vive en el siglo XXI aún se siente agraviada por algo que ocurrió hace cinco siglos?
Con motivo de los 500 años de la caída de México-Tenochtitlan y los 200 de la independencia de México, siete investigadores analizaron desde visiones muy diversas, y sin eludir la polémica, la relación entre España y México, América Latina y Estados Unidos.
¿Por qué la conquista española es conquista y su memoria se quiere eliminar de la faz de la Tierra, mientras que la azteca o anglosajona parecen haberse realizado sin violencia ni guerra y son motivo de orgullo? ¿Cómo es posible que los medios más prestigiosos del mundo aplaudan libros que contienen errores garrafales sobre la historia del mundo hispánico? ¿Se puede hablar de América Latina como parte de Occidente?
Cada capítulo es una pregunta que responden los autores (Emilio Lamo de Espinosa, que además coordina la edición, Martín F. Ríos Saloma, Tomás Pérez Vejo, María Elvira Roca Barea, Luis Francisco Martínez Montes, José María Ortega). Están ordenadas en dos bloques: el primero, “La realidad. De la conquista al virreinato a América Latina”, siendo el segundo “... y su representación. ¿Una renacida leyenda negra?”. Guadalupe Jiménez Codinach cierra el libro con una reflexión a modo de epílogo.
La obra no responde las preguntas, pero aporta al debate, porque acaso, “¿Hablamos del pasado, o hablamos del futuro cuando invocamos la memoria?”.
La disputa del pasado. España, México y la leyenda negra. Emilio Lamo de Espinosa (coordinador). Turner, Madrid, 2021. 248 páginas. 990 pesos.