La del 30 comenzó hace seis años como un jam de candombe en el centro cultural de Maldonado Lengue Lengue, contó Manuel Ojeda, guitarrista de la banda. Al principio se trataba de una “cuerda de tambores autoconvocada”: tocadores con distintas banderas se unían para hacer música. La improvisación y la espontaneidad de esas creaciones dieron paso a la consolidación de la banda y al encuentro con el candombe instrumental.

“La banda tiene su veta de baile o de candombaile -cosas de otra época-, su veta más jazzera, su veta más melódica y también más improvisada y ritual”, explicó Ojeda.

Los diversos estilos se encuentran condensados en el disco homónimo de la banda, que se lanzó este año. Entre sus 20 canciones hay composiciones propias, colectivas, versiones de clásicos del candombe, hay voces y hay poesía.

La del 30 está integrada por Julio Sánchez en tambor chico, Andrés Tabárez en tambor piano, Damián Taveira en tambor repique, Charly Méndez en piano, Bruno Repetto en batería, Bruno Taveira en bajo y Ojeda en guitarra. El disco cuenta con colaboraciones de Nicolás Mora, Liber Galloso, Nico Grieco, Analía Parada y su exintegrante, el guitarrista y compositor Nahuel Bentancur, además de poemas del poeta y candombero maldonadense Julían Quintana, recitados por él mismo.

Entre las influencias musicales que se destacan en la banda, Ojeda mencionó a Ruben Rada, Hugo Fattoruso, y bandas como Opa, que fusionaron el candombe con el jazz y el rock en los años 70, y Lady Jones, que tuvo repercusión en la escena del candombe de los 90.

Más cerca de la actualidad, en La del 30 resuenan los repertorios de Alejandro Luzardo y del Combo Candombero. También se aventuraron a transformar canciones del brasileño Hermeto Pascoal al candombe.

Foto del artículo 'La del 30: una propuesta de candombe fusión desde Maldonado'

Consultado sobre la posibilidad de dar shows en ambientes más íntimos con poco aforo, el guitarrista señaló que las presentaciones de La del 30 tenían la característica de ser muy numerosas, por lo que la banda espera poder volver a pisar los escenarios cuando haya menos riesgos debido a la pandemia.

“La gente está con ganas de que pasen cosas. Ahora la movida es por lo audiovisual y streaming, creo que eso se va a mantener en la pospandemia, pero la tecnología que se requiere para hacerlo va a tener que empezar a ser más accesible en Uruguay porque implica un gran presupuesto”, reflexionó Ojeda.

El lanzamiento del disco contó con el apoyo del Fondo Nacional de Música de Uruguay y se encuentra disponible en las plataformas digitales Spotify y Bandcamp.