El martes, la Cámara Empresarial de Maldonado, presidida por José Pereyra –quien además es el director electo por el orden empresarial del Banco de Previsión Social– manifestó su rechazo a la marcha organizada por la Asociación de Bancarios del Uruguay (AEBU), que es una de las medidas que resolvió el sindicato, así como la decisión de no reponer los cajeros automáticos de la Banca Oficial.

La marcha se realizará el 25 de febrero, en Punta del Este, en el marco del conflicto que AEBU mantiene con el gobierno debido al ajuste salarial aplicado en enero de 5,8%, en el que, según el sindicato, se omitió la deuda de 2,96% generada en 2021 por la pérdida salarial. Entre los motivos de la manifestación también está la eliminación de dos tercios de las vacantes, algo que implica una contravención a lo establecido en el instructivo de la Oficina de Planeamiento y Presupuesto (OPP).

A través de un comunicado, la Cámara Empresarial de Maldonado planteó que la marcha “atenta contra los trabajadores de sectores vinculados al turismo del departamento”, y agregaron que se trata de una “protesta solapada de una actividad recreativa como es disfrutar de las playas de Punta del Este durante el fin de semana de Carnaval”.

Los integrantes de la Comisión Directiva de la cámara señalaron que las fechas elegidas son perjudiciales para el “aparato productivo” de Maldonado, que enfrenta dificultades desde que comenzó la crisis sanitaria. La resolución de la cámara fue tomada el 2 de febrero y contó con la votación unánime de los integrantes de la comisión.

Por su parte, el intendente de Maldonado, Enrique Antía, dijo en entrevista con Informativo Uruguay que “la marcha de la resistencia” (como la denominó AEBU) es una “movida sindical contra la ley de urgente consideración (LUC)”, y que quienes marcharán “son toda gente que tiene la platita todos los meses en el bolsillo, el jornal asegurado, no arriesgan nada”, en comparación a los empleados de los comercios, restaurantes y hoteles de Punta del Este.

“Está bien que vengan a Punta del Este, es su derecho. Capaz que llegan hasta Punta del Este, eso tenemos que analizarlo, porque [con] interrumpir el trabajo nosotros no estamos de acuerdo. Hace unos años quisieron hacer esto y nosotros encontramos un lugar para que se manifestaran tranquilos”, expresó el intendente. Agregó que la marcha significa “pegarse un tiro en el pie” para los promotores de la campaña por el Sí a la derogación de los 135 artículos de la LUC.

En redes sociales, los diputados blancos Rodrigo Blás y Diego Echeverría manifestaron su apoyo a los dichos del intendente. Blás tuiteó: “No creo que obstaculizar el trabajo de los demás sea una buena medida y [una] solidaria forma de hacerse escuchar. Tienen derecho a hacerlo, pero ni criterio ni empatía”.

“Hoy no hay inclusión financiera obligatoria y AEBU se siente poderoso amenazando con 10 días sin sistema financiero. ¡No quiero imaginar si tuvieran el poder en un sistema con inclusión financiera obligatoria! Con razón defienden el Sí, que quiere volver a eso. Defienden su poder”, lanzó Echeverría.

En sintonía con la Cámara Empresarial de Maldonado, dijo: “Cuando los sindicatos defienden causas político-electorales suelen distraerse y no miran el daño que hacen a otros trabajadores. Una pena. Están a tiempo de evitar un gran daño”.