La Intendencia de Maldonado (IDM) envió un expediente a la Junta Departamental con el objetivo de desafectar del dominio público y vender la denominada Plaza de la Madre, de Piriápolis, y destinar lo recaudado al “mantenimiento y reconstrucción del acervo histórico, artístico y cultural” del balneario. La resolución, firmada por Enrique Antía del 12 de junio, ingresó la semana pasada a la Junta Departamental y podría tratarse en el plenario de este martes 24.

El padrón 2236, donde se ubica la plaza, es propiedad de la IDM, mide 4.890 metros cuadrados y está en primera línea del barrio Los Ángeles, junto a la Rambla de los Argentinos. Rodeada mayormente por construcciones unifamiliares, es la única manzana completamente libre de construcciones en esa zona. Allí se han realizado numerosos eventos masivos, entre los que se destacan el Antel Fest, ferias de emprendedores, recitales y encuentros de auto-tunning.

“Esta localización le otorga un alto valor paisajístico y comercial, al tratarse de una zona consolidada, de fuerte atracción turística y con buena accesibilidad”, fundamenta la Dirección de Agrimensura y Catastro, favorable a la venta, en el expediente, al que accedió la diaria.

El terreno “no estaría cumpliendo a cabalidad con una finalidad específica y destacable en pro del bien público”, escribió en su informe el secretario general de la IDM, Luis Eduardo Pereira, para quien se necesita “optimizar recursos dándole un mejor destino”. “La utilidad para la administración es escasa”, afirma, considerando que “el predio “cuenta con muy buena ubicación y potencialidad visible, como para obtener una segura fuente de recursos para solventar las inversiones necesarias”.

La Dirección de Catastro tasó el inmueble en US$ 1.423.156, según los valores “urbanísticos, físicos y condiciones del mercado en el entorno inmediato”. En su evaluación, menciona que en el predio existe “la posibilidad de edificar bloques bajos o conjuntos de bloques bajos de hasta 12 metros de altura”.

Fondos para el castillo e iglesia de Piria y el Pabellón de las Rosas

La postura de Pereira es compartida por el director general de Cultura, Jorge Céspedes, en otro informe. En el documento amplía que los recursos de la venta serán volcados a un fideicomiso cuyo objetivo será “la recuperación y puesta en valor del Castillo de Piria, declarado Monumento Histórico Nacional en 1984”. Afirma que la venta de la plaza también “permitirá realizar obras para mejorar las instalaciones de la llamada iglesia de Piria”, que pasó a manos de la IDM en agosto de 2014, con accesos, caminería e iluminación “adecuados”.

Por otra parte, Céspedes sostiene que esta administración tiene la “decisión firme” de “recorrer los caminos imprescindibles para iniciar los trabajos esenciales” de la recuperación edilicia y puesta en valor del Pabellón de las Rosas. Argumenta que esta estructura patrimonial de la ciudad está en un “franco y acelerado proceso de deterioro” y que los fondos del fideicomiso posibilitarán su recuperación.

Las citadas construcciones, alega Céspedes, son parte del legado del fundador de la ciudad, Francisco Piria. “Asumir la posibilidad de realizar las obras de recuperación patrimonial con buena parte de su financiación resuelta allanaría el camino para iniciar en el corto plazo este compromiso con la historia y la comunidad”, concluye.

Al hacer lugar a los informes de marras, el director general de Planeamiento, Roberto Chiacchio, destaca “la relevancia que tiene el patrimonio cultural para este Ejecutivo departamental y el efecto de identidad social que tienen los bienes históricos Castillo e Iglesia de Piria para los vecinos de la zona”.

La plaza “no se vende”

A impulso de algunas organizaciones sociales y políticas, la comunidad piriapolense no tardó en reaccionar al plan de la IDM. “La Plaza de la Madre es un valor de interés patrimonial y ambiental. No se vende” fue una de las consignas de una movilización que tuvo lugar el sábado en el balneario, con una nutrida cantidad de participantes, pese al frío y la lluvia. “Es un espacio público de interés y la queremos para todas las personas que vivimos en Piriápolis y las que nos visitan”, indicó otra.

El encuentro fue el punto de partida para una campaña de recolección de firmas que se extenderá hasta el viernes 27 de junio, con vistas a la presentación de un recurso que impugne la resolución enviada por el intendente Antía a la Junta Departamental.

Uno de los activistas por esta causa es el abogado Juan Ceretta, quien divulgó en sus redes el afiche de la convocatoria bajo la frase “Evitemos la venta de una plaza pública, los espacios públicos deben defenderse”.

También el dirigente colorado local Jorge Schusmann fue de la partida. Según registros gráficos, asistió al comunal de Playa Grande y Barrio Jardín, uno de los varios donde se encuentran las planillas, para firmar contra el plan de la IDM.

El comité Eduardo Mondello, del Frente Amplio de Piriápolis, divulgó en sus redes el expediente del caso y opinó: “¿La Intendencia de Maldonado quiere vender la Plaza de la Madre de Piriápolis? Hacer algo de uso público, de convivencia, integrador ¿es posible? ¿O ya está todo arreglado?”.

“Dudas razonables” en el FA

El edil reelecto por el Frente Amplio, Juan Urdangaray, dijo a la diaria que la bancada no ha tomado postura sobre el tema, aunque estudia el expediente y tiene dudas sobre el trasfondo de la transacción propuesta.

En cuanto al Pabellón de las Rosas, Urdangaray afirmó que sigue perteneciendo al Ministerio de Turismo, aunque en su momento el intendente Antía manifestó la intención de que pasara a manos de la IDM. Sobre este punto, el edil habló con la subsecretaria Ana Caram, quien confirmó que el edificio es propiedad de la cartera y aseguró que la IDM “no ha iniciado ningún contacto” para evaluar vías de financiación de una refacción edilicia.

“Esto abre la duda sobre el verdadero objetivo de la venta de un espacio tan valioso para la comunidad. ¿Por qué la IDM hace gárgaras con una propiedad que no es suya?”, cuestionó Urdangaray. También observó que la comuna “nunca golpeó puertas ante el gobierno nacional o alguno de sus organismos para la puesta en valor del castillo de Piria o la iglesia. No agotó otras vías ni buscó alternativas antes de salir a vender este lugar privilegiado”, apuntó.

Urdangaray también se preguntó “qué hay detrás” de esta venta, que se produce a pocas semanas de que el gobierno departamental cambiara la normativa de construcciones, permitiendo edificios de hasta 12 metros en la zona. “Primero se cambia la normativa y ahora la IDM va a vender. ¿Para quién está armando la jugada?”, expresó el edil. Dadas las prácticas de la administración en favor de las excepciones a la normativa de la construcción, sospecha que “cualquier proyecto en ese padrón podría superar el metraje establecido”.

Urdangaray señaló que, inicialmente, se esperaba que el expediente sea votado en el plenario este martes 24. Sin embargo, dado el rechazo comunitario que generó la medida, cree que probablemente se postergará.

Por lo pronto, la bancada del FA tomará postura este martes. “El FA siempre mantuvo una línea de defensa de los espacios públicos de calidad y este es el único espacio público que queda frente a la rambla. En principio, siguiendo la línea de actuaciones de este período cada vez que se quiso vender un espacio público de calidad, entendemos que este caso es una locura”, concluyó.