Muchas cosas estarán en juego el domingo en Argentina, ya que tendrán lugar las elecciones legislativas en las que se renovarán casi la mitad de los cargos de la Cámara de Diputados y un tercio de las bancas del Senado.

El antecedente inmediato de estas elecciones fueron las Primarias, Abiertas, Simultáneas y Obligatorias (PASO) de setiembre, comicios que, si bien fueron internos, marcaron dónde estaba parado cada sector. El resultado fue elocuente y significó un durísimo golpe para el oficialismo. En dichas elecciones la fuerza más votada en todo el país fue la coalición opositora Juntos por el Cambio –que tiene como partidos principales al PRO de Mauricio Macri y a la Unión Cívica Radical–, que logró 41,53% de las adhesiones, y segundo quedó el Frente de Todos, bloque que agrupa a la mayor parte del peronismo, con 32,43%. Con este panorama, Juntos por el Cambio tiene fundadas expectativas de llegar, tras las elecciones del domingo, a tener la mayoría en la Cámara de Diputados, lo cual sería otro golpe duro para el gobierno de Fernández, que deberá finalizar su mandato con ese órgano legislativo en contra.

La derrota en las PASO generó intensos movimientos dentro del Frente de Todos y del gobierno, en los que quedaron de manifiesto las grandes diferencias de enfoque que hay entre el presidente Alberto Fernández y su vice, Cristina Fernández. Una reestructura de gabinete fue la reacción del Ejecutivo en su intento de mostrar una cara diferente ante la ciudadanía y también para tratar de zurcir las divergencias entre los Fernández.

Coronavirus, tribunales e inseguridad

Mientras la vacunación contra la covid-19 sigue avanzando, lo peor de la pandemia parece haber pasado en Argentina, país que durante 2020 padeció la pandemia que conllevó estrictas medidas restrictivas por parte del gobierno de Fernández. El factor pandémico pesó mucho en la previa de las PASO, pero ahora el escenario en algo ha cambiado.

Ausente durante la campaña anterior, el expresidente Mauricio Macri, quien fue prudentemente ocultado por la oposición, ha vuelto a tomar cierta centralidad en las últimas semanas por su forzosa ida a los tribunales, en los que debió comparecer en la causa que investiga presuntas escuchas ilegales hechas durante su gobierno a los familiares de los 44 marinos fallecidos en el hundimiento del buque ARA San Juan, a fines de 2017.

El propio Macri, luego de presentarse ante el juez Martín Bava, lo acusó de estar actuando mandatado por el oficialismo con una clara finalidad política y electoral. También la figura del exmandatario es frecuentemente aludida desde el gobierno para recordarle una y otra vez a la población que parte de la durísima situación económica que vive el país se debe a la gigantesca deuda que el gobierno macrista asumió con el Fondo Monetario Internacional.

Sabedora de que lleva la delantera en el camino a las elecciones, la oposición intentó seguir tirando dardos hacia el gobierno, pero en el marco de una campaña prudente, sin arriesgar demasiado.

Pero en los últimos días otro tema volvió a resurgir en la recta final rumbo a los comicios: el de la inseguridad.

En gran medida la cuestión volvió al foco de la agenda por el asesinato de Roberto Sabo, un hombre de 45 años que tenía un quiosco en la localidad de Ramos Mejía, en el partido de La Matanza, en el Gran Buenos Aires, y que fue baleado el domingo cuando intentaron robar su comercio. Por el crimen están detenidos como presuntos autores un hombre de 29 años y una adolescente de 15, pero más allá de la indignación que generó el hecho, la oposición intentó sacar rédito político de la situación, algo que fue rechazado en forma contundente desde el Ejecutivo.

En este sentido, este jueves la vocera presidencial, Gabriela Cerruti​, aseguró que el gobierno “comprende” el problema de la inseguridad y que se toman medidas en función de buscar una solución a este flagelo, pero reconoció que son “insuficientes”.

“Tampoco queremos dejar de decir que nos produce profundo asco la utilización electoral de la tragedia de una familia y el dolor de una familia”, agregó la funcionaria, de acuerdo a lo que informó Clarín. Además, Cerruti envió un mensaje al jefe de gobierno de la ciudad de Buenos Aires, Horacio Rodríguez Larreta, al asegurar que los índices de seguridad son mejores en la provincia que en el territorio porteño.

“Yo podría discutir estadísticas y decir que la estadística de la inseguridad en este momento en la ciudad de Buenos Aires subió y en la provincia, no, ya que son los datos que tenemos hoy concretamente”, manifestó Cerruti.

Paralelamente, este jueves los dos principales sectores de la política argentina hicieron actos de cierre de campaña previo a las elecciones.

El Frente de Todos celebró un evento en la localidad de Merlo, en la provincia de Buenos Aires –el principal distrito del país, en el que en las PASO sufrió una dura derrota, a pesar de ser un tradicional bastión del peronismo–, acto en el que se hicieron presentes el presidente Fernández y también la vicepresidenta Cristina Fernández. Existían dudas acerca de la presencia de la exmandataria porque hace pocos días se sometió a una operación quirúrgica –una histerectomía–, pero finalmente, y en una clara señal de apoyo a su sector, decidió concurrir. En el acto hablaron, entre otros, el mandatario, el gobernador de la provincia de Buenos Aires, Axel Kicillof, y la principal candidata a diputada del sector, Victoria Tolosa Paz.

Por su parte, los opositores hicieron su cierre de campaña en la capital bonaerense, La Plata, donde los oradores fueron los principales candidatos a diputados por el bloque, Diego Santilli y el radical Facundo Manes.

En su discurso, Santilli, llamó a “construir una provincia distinta” y a “cambiar la historia”. Acompañado por Facundo Manes y por el resto de los candidatos de la lista, además de intendentes y referentes provinciales, Santilli dedicó gran parte de su discurso a cuestionar al gobierno nacional.

“Le pedimos trabajo al gobierno y nos respondieron con platita, como si pudieran comprar nuestra dignidad. Y le pedimos que apoyen a los comercios y pymes, y nos respondieron con militantes controlando los comercios”, remarcó Santilli, según informó la agencia Télam.

Santilli también agradeció a los referentes nacionales que lo acompañaron en distintas recorridas de campaña, y nombró a Macri, Patricia Bullrich, Elisa Carrió y Horacio Rodríguez Larreta.

“Si nos das tu voto vamos a ir a discutir los temas que a vos te importan, no los que les importan a los políticos”, afirmó en el cierre el candidato. Por su parte, el radical Manes, una figura que viene de afuera de la política y que hasta hace pocos meses únicamente era conocido por ser un destacado médico neurólogo, dijo durante su discurso: “No podemos emparchar más, tenemos que hacer una revolución”.

“Tenemos que hacer una revolución del conocimiento”, aclaró, y sostuvo que “vamos a luchar contra la inseguridad; no nos conformamos con tratar los síntomas, vamos a trabajar sobre las causas”.