En un discurso que dio en el Club Valdai, un think tank afín a su gobierno, el presidente ruso, Vladimir Putin, manifestó que para su país no tiene sentido “político ni militar” un posible uso de armas nucleares en Ucrania y remarcó que las amenazas sobre el uso de este tipo de armamento son estrategias de las potencias occidentales.

“Nunca hemos dicho nada sobre el posible uso de armas nucleares por parte de Rusia, sino que sólo escuchamos declaraciones hechas por los líderes de los países occidentales”, dijo Putin en sus declaraciones de este jueves.

El mandatario recordó que el único país que usó armas nucleares fue Estados Unidos y agregó: “La era del dominio occidental en el mundo se está desvaneciendo”, y dijo que la actual situación es un “punto de inflexión”, ya que a su juicio se está viviendo la década “más peligrosa” desde la Segunda Guerra Mundial.

El mandatario ruso volvió a hacer referencia a la posible detonación de una “bomba sucia” por parte de Ucrania y dijo que por esa razón ordenó a su ministro de Defensa, Serguéi Shoigú, que se comunique con sus homólogos de las principales potencias de la Organización del Tratado del Atlántico Norte (OTAN) para plantearles el tema.

Desde Moscú se viene reiterando con insistencia en las últimas semanas sin aportar pruebas de que Ucrania se estaba preparando para detonar un dispositivo radiactivo de bajo rendimiento en su propio territorio, lo que llevó a Kiev y a otros gobiernos occidentales a considerar que Putin podría estar preparando un ataque de “bandera falsa”.

En otra parte de su discurso, Putin dijo que, a pesar del conflicto actual, Rusia nunca se consideró ni se considera un enemigo de Occidente. “En las circunstancias actuales de conflicto brutal, diré algunas cosas sin rodeos: Rusia, al ser una civilización independiente y autosuficiente, nunca se ha considerado y no se considera un enemigo de Occidente”, afirmó.

El jefe de Estado agregó que, desde su visión, es necesario tener claro que hay dos Occidentes: uno se adhiere a los valores tradicionales, principalmente cristianos, la libertad, el patriotismo, la riquísima cultura.

“Este Occidente es algo cercano a nosotros en muchos aspectos; tenemos raíces comunes que vienen desde la Antigüedad”, dijo.

También incluyó los valores islámicos a los valores tradicionales de este Occidente, ya que una parte importante de los occidentales practican el Islam. “Pero también hay un Occidente diferente: agresivo, cosmopolita, neocolonial, que actúa como instrumento de las ideas neoliberales. Y Rusia, por supuesto, nunca estará de acuerdo con el dictado de este Occidente”, subrayó Putin.

También el jueves, de acuerdo a lo que consignó la agencia France Presse, el portavoz presidencial ruso, Dmitri Peskov, acusó a los ucranianos de retirarse de las negociaciones de paz “por orden” del gobierno de Estados Unidos.

“De hecho, el texto estaba listo. Y luego, de repente, la parte ucraniana desapareció de los radares, dijo que ya no quería continuar las negociaciones”, comentó Peskov, al afirmar que el presidente Putin había considerado “obvio” que “tal rechazo de los acuerdos ya alcanzados ocurrió claramente por orden de Washington”.

Paralelamente, más allá de las declaraciones, la guerra prosigue y este jueves autoridades de la empresa pública que gestiona la red eléctrica de Ucrania, Ukrenergo, denunciaron nuevos ataques rusos contra infraestructuras energéticas que causaron daños en instalaciones del centro y norte del país y alertaron que habrá más cortes en el suministro. En un comunicado, Ukrenergo especificó que los bombardeos obligaron a restringir los servicios en las provincias de Kiev, Zhitómir (centro-norte), Cherkasy (centro) y Chernígov (norte).

Por otra parte, en el aspecto estrictamente militar, el subdirector de la Dirección General de Operaciones del Estado Mayor de Ucrania, Oleksii Hromov, afirmó que Ucrania reforzó sus tropas en el norte del país, en la zona cercana a la frontera con Bielorrusia, para contrarrestar cualquier posible ataque ruso después de que Minsk creara una unidad militar conjunta con Rusia. “Ahora mismo no se observa la creación de una fuerza de ataque [en Bielorrusia]. [Pero] hay y habrá amenazas. Estamos reaccionando, ya hemos incrementado nuestras tropas en la dirección norte”, dijo Hromov, según informó El País de Madrid.