Las enfermeras de Inglaterra, Gales e Irlanda del Norte empezaron este jueves una huelga nacional, la movilización más grande de este grupo de trabajadores en toda la historia del Servicio de Salud Nacional (NHS, por su sigla en inglés), creado luego de la Segunda Guerra Mundial, en 1948.

El Real Colegio de Enfermeras (RCN) dijo que al personal no le había quedado otra alternativa después de que los ministros del gobierno que encabeza el conservador Rishi Sunak se negaran a reabrir las negociaciones salariales.

Entrevistada por la BBC, la secretaria general del RCN, Pat Cullen, pidió al gobierno que “haga lo decente” y resuelva el problema antes de que finalice el año. Cullen agregó que el inicio de esta paralización significó “un día trágico en la enfermería” en el país.

Según informaron medios británicos, a pesar de la paralización de sus tareas, habrá personal de enfermería que continuará trabajando en áreas esenciales, que no pueden prescindir de cuidados.

Los servicios como los tratamientos de quimioterapia y las diálisis renales proseguirán funcionando con normalidad, así como los trabajos en las salas de cuidados intensivos y con los enfermos críticos, la atención de las personas accidentadas, las emergencias infantiles y las unidades hospitalarias neonatales, que atienden a los recién nacidos. Otros procedimientos sí se verán alterados, como las intervenciones quirúrgicas no urgentes y tratamientos planificados con anterioridad.

“Necesitamos defender nuestro servicio de salud, necesitamos encontrar una manera de abordar a los más de siete millones de personas que están en listas de espera, ¿y cómo vamos a hacer eso?”, se preguntó Cullen.

Por su parte, en declaraciones a Radio Francia Internacional, Tim Martin, enfermero e integrante del sindicato, explicó que no tuvieron otra opción que convocar el paro. “Hay dos razones por las que comenzamos esta huelga. La primera es por el aumento del costo de vida. La segunda es más profunda. Los jóvenes no quieren trabajar en el servicio de salud porque los salarios son muy bajos y vemos cómo todos los días personas que trabajan en el sector se van porque no se pueden permitir seguir desempeñándose en estas condiciones. El NHS se está despedazando porque no podemos proveer el servicio que queremos. Tenemos más de 100.000 vacantes de enfermeras y nos faltan miles de doctores. Por esto hacemos huelga”, afirmó.

La ministra de Salud del gobierno de Sunak, Maria Caulfield, quien es enfermera de profesión, admitió en las últimas horas que “es difícil vivir con el salario de una enfermera”, pero dijo que un aumento salarial de 19% “es un pedido poco realista”.

El líder de la oposición, el laborista Keir Starmer, un día antes del comienzo de la huelga, criticó con dureza al primer ministro Sunak durante una intervención en el Parlamento. “Dentro de 12 horas hay huelga de enfermeras. Todo lo que tiene que hacer es reunirse con las enfermeras. Su inacción lo dice todo. Como siempre con este primer ministro, primero la política conservadora, después los pacientes. Que las enfermeras vayan a la huelga es una vergüenza para este gobierno. En vez de mostrar liderazgo, está jugando con la salud de la gente”, afirmó Starmer, quien horas más tarde en su cuenta de Twitter escribió: “Mi gobierno laborista se arremangará para arreglar el NHS. No habrá más curitas. Capacitaremos a una nueva generación de médicos y enfermeras para que los pacientes vuelvan a ser tratados a tiempo”.

La huelga involucrará a enfermeras en alrededor de una cuarta parte de los hospitales y otros centros de salud en Inglaterra, todas las dependencias de salud de Irlanda del Norte y todas menos una en Gales. Las enfermeras no están en huelga en Escocia, el otro país que integra Reino Unido, porque en el comienzo de esta semana los trabajadores lograron llegar a un acuerdo con el gobierno local que lidera la nacionalista Nicola Sturgeon.

El portal Euronews recordó datos de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE), que muestran que el salario promedio de las enfermeras en Reino Unido es de 42.000 euros anuales. En todo el territorio europeo, sólo en siete países los enfermeros ganan más de 50.000 euros al año. El salario anual de una enfermera en Francia (35.531 euros) o Italia (29.222 euros) es menos de la mitad que en Bélgica (72.508 euros) y casi exactamente la mitad que en Suiza (70.965 euros).