En una conferencia de prensa que ofreció en Moscú luego de estar reunido durante más de cinco horas con el primer ministro de Hungría, Viktor Orbán, el presidente ruso, Vladimir Putin, dijo que en sus respuestas enviadas la semana pasada a la cancillería rusa las potencias occidentales no tomaron en cuenta las demandas de seguridad pretendidas por Moscú para rebajar las tensiones que en estos momentos se viven en la frontera con Ucrania.
“Estados Unidos ignoró nuestras principales demandas”, declaró Putin, en la que fue su primera reacción pública a la respuesta estadounidense a sus peticiones de seguridad para el este de Europa. Además, de acuerdo a lo que informó El País de Madrid, durante su comparecencia ante los medios, el presidente ruso le mandó un mensaje al gobierno ucraniano de Volodimir Zelenski, a quien culpó directamente de la escalada militar en torno a sus fronteras. “Al amenazar a la Federación Rusa, Kiev está poniendo en peligro su propia integridad”, dijo en tono desafiante Putin.
El presidente ruso reiteró nuevamente sus principales exigencias: el regreso de la Organización del Tratado del Atlántico Norte (OTAN) a sus fronteras de 1997, cuando aún en el bloque no estaba ningún país del este de Europa -en 1999, y con un enorme disgusto de parte del Kremlin, pasaron a ser miembros de la entidad Polonia, Hungría y República Checa-, y la garantía por escrito de que no desplegará armas cerca de sus fronteras, lo que de hecho significa la exclusión del ingreso de Ucrania en el tratado. Putin volvió a decir que una eventual entrada de este país en la OTAN podría dar alas a Kiev para intentar recuperar Crimea, y aseguró que Moscú “quiere evitar cualquier escenario negativo” con el país vecino.
De todas maneras, Putin no cerró las puertas a una salida diplomática del conflicto, aunque remarcó que este eventual acuerdo se dará siempre y cuando “se acerque” a sus propuestas. Paralelamente, Putin dijo que Estados Unidos pretende “contener el desarrollo de Rusia”.
“Ucrania es sólo un instrumento para lograr este objetivo. Se puede hacer de diferentes maneras, como empujarnos a un conflicto armado y luego obligar a sus aliados en Europa a promulgar esas duras sanciones contra nosotros que se están discutiendo hoy en Estados Unidos”, agregó el presidente ruso.
Los dichos de Putin fueron respondidos en forma burlona desde Washington por la secretaria de prensa de la Casa Blanca, Jen Psaki, quien comparó las palabras del líder ruso a “cuando el zorro grita desde lo alto del gallinero que les tiene miedo a las gallinas”.
“Sabemos quién es el zorro en este caso”, dijo Psaki, según informó The New York Times. “Rusia tiene 100.000 soldados en la frontera”, agregó, y “ellos son los agresores”.
Además, este martes conversaron telefónicamente el secretario de Estado estadounidense, Antony Blinken, y el ministro de Asuntos Exteriores ruso, Serguéi Lavrov. Ambos coincidieron en que las negociaciones continuarán pese al rechazo a las demandas clave del Kremlin, y llegaron a la conclusión de que es necesario seguir agotando las acciones diplomáticas para evitar llegar a un enfrentamiento armado.