Antony Blinken, el secretario de Estado estadounidense, visitó este martes la ciudad cisjordana de Ramala, donde se reunió con el presidente de la Autoridad Nacional Palestina, Mahmud Abbas, y le transmitió su preocupación por la “deriva actual” en el conflicto israelí-palestino. Dijo que hoy prevalece una “profunda preocupación sobre la trayectoria” de violencia, y que “en primera instancia” cree que “es importante tomar medidas para desescalar”.
El secretario de Estado abogó por la solución de dos estados como única manera de que israelíes y palestinos logren “democracia, oportunidades y dignidad”, y manifestó que su país está en contra de “cualquier acción” que aleje ese objetivo, según citó la agencia Efe.
A su vez, Abbas le transmitió su disposición a trabajar con Estados Unidos para “restaurar el diálogo político” y “poner fin a la ocupación israelí”. De acuerdo con Europa Press, el presidente palestino afirmó que el crecimiento de la violencia en la región es “responsabilidad” del gobierno de Israel por “socavar la solución de dos estados y violar los acuerdos firmados”.
Abbas también cuestionó “la falta de esfuerzos internacionales para desmantelar la ocupación, poner fin al sistema de asentamientos y reconocer el Estado palestino”. Consideró que esa realidad “anima al ocupante israelí a cometer más crímenes y violar el derecho internacional”.
El presidente palestino dijo también que “el cese total de las acciones unilaterales israelíes [...] es el principal punto de partida para retomar el horizonte político y poner fin a la ocupación en línea con las referencias internacionales y la Iniciativa Árabe de Paz, con el objetivo de lograr paz, estabilidad y seguridad para todos en la región y el mundo”. Agregó que “la seguridad regional no aumentará con la profanación de los lugares santos, pisoteando los derechos de los palestinos e ignorando sus derechos legítimos a la libertad, la dignidad y la independencia”.
Por su parte, Blinken manifestó que “Estados Unidos se opondrá a la expansión de los asentamientos o la anexión de territorio cisjordano, así como violaciones del statu quo y la demolición de viviendas”, y agregó que “todas las partes deben tomar medidas para evitar un mayor aumento de la violencia”. El secretario de Estado llamó a israelíes y palestinos a “condenar de forma inequívoca cualquier acto de violencia, independientemente de la víctima o del autor”.
La visita de Blinken a Cisjordania fue parte de una gira que lo llevó a Egipto e Israel en un momento de creciente tensión en la región, después de que una redada israelí dejara diez muertos en Jenín, el jueves, y de que un atentado palestino matara a siete israelíes en Jerusalén, el viernes.
En Israel, Blinken también había llamado a “tomar medidas para desescalar las tensiones” entre israelíes y palestinos, y había manifestado que su “compromiso con la seguridad de Israel sigue y seguirá siendo inquebrantable”.
Según informó Efe, Egipto y Rusia manifestaron este martes su voluntad de relanzar las conversaciones entre israelíes y palestinos para frenar la violencia. El ministro de Relaciones Exteriores ruso, Serguéi Lavrov, recibió a su par egipcio, Sameh Shukri, y al igual que Blinken manifestó su preocupación “por la dinámica negativa del desarrollo de la situación en la zona del conflicto palestino-israelí”. Lavrov dijo que tanto su país como Egipto consideran necesario “un pronto relanzamiento de las conversaciones palestino-israelíes” con mediación de Estados Unidos, Rusia, la Unión Europea y la Organización de las Naciones Unidas para solucionar el conflicto.