Dos videos que circularon en redes sociales rusas y fueron detectados por la cadena CNN renovaron los llamados del gobierno de Ucrania a establecer un tribunal que juzgue crímenes cometidos por Rusia en ese país en el marco de la guerra que empezó en febrero del año pasado.

Uno de los videos muestra lo que parecen ser cadáveres de soldados ucranianos decapitados que se encuentran en el suelo, junto a un vehículo de guerra, y en otro se ve supuestamente a un combatiente ruso decapitar con un cuchillo a un soldado de Ucrania. El impacto de las imágenes generó distintas reacciones de repudio.

“Es algo que nadie en el mundo puede ignorar: la facilidad con la que matan estas bestias”, dijo el presidente ucraniano, Volodímir Zelenski, y afirmó que no se trata de un caso aislado sino de una “nueva normalidad”, según citó la agencia Efe. “Ha pasado antes. Ha pasado antes en Bucha. Miles de veces”, dijo el presidente ucraniano. “No vamos a olvidar nada. Tampoco vamos a perdonar a los asesinos. Habrá responsabilidades legales por todo. La derrota del terror es necesaria”, agregó. Zelenski pidió a “cada uno de los líderes” de los distintos países que adopten medidas que contribuyan a “derrotar al terror”, y agregó que “nadie entendería que los líderes no reaccionaran”.

Por su parte, el gobierno de Rusia puso en duda la autenticidad de los videos. “Para empezar, hay que comprobar la veracidad de las imágenes”, dijo el portavoz de la Presidencia, Dmitri Peskov. “Ante todo, en el mundo de noticias falsas en el que vivimos es necesario comprobar la autenticidad de este video”, insistió, y consideró que eso permitiría “investigar si efectivamente ocurrió y, si es así, quién lo hizo y dónde”. De todos modos, el funcionario del Kremlin reconoció que se trata de imágenes “terribles”.

Los servicios secretos ucranianos anunciaron este miércoles que iniciarán una investigación para tratar de identificar a las personas que aparecen en las imágenes. “Ayer apareció un video en una red de los ocupantes rusos que demuestra su naturaleza bestial, en el que se tortura de forma brutal a un prisionero ucraniano a quien se le corta la cabeza”, dijo el servicio secreto en un comunicado. “Encontraremos a esos inhumanos”, declaró su jefe, Vasyl Malyuk.

Ante versiones de que la persona que decapita a un militar ucraniano en las imágenes podría ser uno de los mercenarios que integran el grupo Wagner, organización que está teniendo un papel muy activo en los combates que están dando desde hace meses en la región del Donbás, el jefe de la empresa, Yevgueni Prigozhin, un personaje muy cercano al presidente ruso, Vladimir Putin, lo negó. “Vi ese video. Está mal que le corten la cabeza a la gente, pero no encontré en ningún lado nada que indique que esto tenga lugar en Bajmut [como dicen algunos usuarios de redes sociales] ni que los combatientes de Wagner participen”, manifestó en su cuenta de Telegram. Según CNN, Prigozhin respondió así a una pregunta sobre el video con cadáveres decapitados.

En respuesta a los dos videos, la Unión Europea reiteró el miércoles “su firme compromiso de pedir cuentas a todos los autores y cómplices de crímenes de guerra” cometidos en Ucrania. Así lo dijo la portavoz de Relaciones Exteriores del bloque Nabila Massrali, quien agregó que “de confirmarse” lo que muestran las imágenes, “se trataría de otro brutal recordatorio de la naturaleza inhumana de la agresión rusa”.

“Matar a prisioneros de guerra es una violación muy grave de la Convención de Ginebra y demuestra una vez más el total desprecio de Rusia por el derecho internacional, en particular, por el derecho internacional humanitario”, agregó Massrali. “Rusia debe cumplir las obligaciones que le impone el derecho internacional y garantizar que los prisioneros de guerra reciban un trato humano y en toda circunstancia y que no se ponga en peligro su vida”, afirmó, según citó Europa Press.

Al igual que Zelenski, la Misión de Observación de los Derechos Humanos de la ONU en Ucrania manifestó en un comunicado que las aparentes ejecuciones “no son un incidente aislado”, y manifestó su “consternación” por los videos “particularmente espantosos publicados en las redes sociales”. La misión afirmó que “en informes recientes” ha documentado “una serie de graves violaciones del derecho internacional humanitario, incluidas las cometidas contra prisioneros de guerra”. “Los últimos incidentes también deben investigarse adecuadamente, y los autores deben rendir cuentas”, agregó.