El derechista Partido Popular (PP) español convocó para el 24 de setiembre un acto contra una eventual amnistía a dirigentes catalanes condenados por el delito de sedición por impulsar el proceso independentista de 2017.

Si bien el gobierno que preside Pedro Sánchez no se comprometió públicamente a una amnistía, sí la reclaman los partidos catalanes Esquerra Republicana de Catalunya y Junts, cuyo respaldo necesita el líder socialista para acceder a otro mandato.

Para el portavoz del gobernante Partido Socialista Obrero Español (PSOE), Patxi López, “la manifestación que ha convocado el PP no es ni contra la amnistía, ni contra la autodeterminación ni contra la independencia, es contra Pedro Sánchez y el PSOE”. El dirigente dijo que el líder del PP, Alberto Núñez Feijóo, “lo único que hace es obedecer a los que le montan la bronca permanentemente”, y entre estos señaló a la presidenta de la Comunidad de Madrid, Isabel Díaz Ayuso, y al expresidente del gobierno José María Aznar.

Según citó la Cadena Ser, López agregó que mientras su partido trabaja “por la convivencia y la concordia” en Cataluña, “otros en el PP están incitando al enfrentamiento cívico”, en alusión a Aznar. El exgobernante llamó a los españoles a lanzar, ante una posible amnistía, una reacción social similar a la que generó en 1997 el secuestro y asesinato del concejal del PP Miguel Ángel Blanco por parte de la organización armada vasca ETA. “Hay que decir de nuevo ‘¡Basta ya!’. España no puede volver y no va a volver a un sistema basado en la exclusión, en el sectarismo ni en la destrucción programada de la nación”, dijo Aznar.

“Está en marcha una operación de desmantelamiento de la Constitución, de destrucción de su legitimidad”, agregó el exgobernante. “El secesionismo motorizado por el Partido Socialista –sea lo que sea ahora este partido– cree haber encontrado su momento, aquel que marca el punto de no retorno hacia la destrucción de la Constitución”, afirmó.

Para Aznar, esta “no será la primera vez que la fortaleza de la sociedad española se pone a prueba”. “Debemos tener la idea clara de que el peligro no viene de fuera; está inducido por una fuerza política, el Partido Socialista”, dijo.

En respuesta a Aznar, la ministra portavoz del gobierno, Isabel Rodríguez, comparó sus dichos con “comportamientos antidemocráticos y golpistas”. La dirigente le reclamó a Núñez Feijóo que le pida a Aznar una rectificación. “Por lo que representa su figura y su ascendencia en el partido, requeriría una petición inmediata de Feijóo de que la rectificara en aras a los valores democráticos que nos son propios y no se corresponden con comportamientos propios de sistemas antidemocráticos y golpistas”, dijo Rodríguez. La ministra se preguntó: “¿Qué sería lo siguiente? ¿La llamada a un alzamiento?”.

Lejos de acceder al pedido de Rodríguez, Núñez Feijóo defendió a Aznar y dijo en sus redes sociales: “España no callará ante su inmoralidad”. El dirigente reconoció que también el PP tuvo contactos con Junts, el partido de Carles Puigdemont, para buscar alianza de gobierno, pero advirtió que no aceptará las condiciones que plantea esa organización política.

Por su parte, Aznar se refirió a la respuesta del gobierno ante sus dichos y afirmó: “Son las reacciones autocráticas, propias de una autocracia, que considera que todo aquel que no está de acuerdo con el que está en el gobierno es antiespañol, fascista o golpista”. Además, insistió con su llamado a la “responsabilidad ciudadana” ante un “momento crítico”.

“En España hemos llegado a un punto límite. Se está negociando una amnistía y celebrar unas consultas de autodeterminación”, afirmó el expresidente, según citó eldiario.es. Agregó que lo que se impulsa “es un acto en contra de la Transición, de la Constitución y en contra de los cimientos de España”.

Para Patxi López, “cuando el PP no tiene el poder se convierte en un partido antisistema”. Por su parte, la vicepresidenta primera del gobierno, Nadia Calviño, cuestionó que Aznar “alarme a la ciudadanía” pidiendo un nuevo “¡Basta ya!”, y agregó que “sonroja escuchar a un expresidente del gobierno que justamente negoció amnistías, negoció todo lo que hiciera falta, hasta hablaba catalán en la intimidad para conseguir el gobierno, hablar en estos términos de la situación de nuestro país”.