Según informó la inteligencia militar ucraniana, el gobierno de Corea del Norte ya envió a alrededor de 12.000 soldados a Rusia, incluyendo a 500 oficiales y tres generales.
La misma fuente, consignada por el portal France 24, afirmó que las primeras unidades norcoreanas entrenadas en territorio ruso ya fueron desplegadas en primera línea, en la región de Kursk, una zona fronteriza rusa donde las fuerzas ucranianas lanzaron una importante incursión en agosto, que todavía no pudo ser repelida por las fuerzas del Kremlin.
“Las primeras unidades militares de la RPDC (Corea del Norte), que fueron entrenadas en los campos de entrenamiento del este de Rusia, ya llegaron a la zona de combate de la guerra ruso-ucraniana. En particular, el 23 de octubre de 2024, se registró su presencia en la región de Kursk”, expresó en un comunicado la agencia de Inteligencia ucraniana.
El informe agrega que el viceministro de Defensa ruso Yunús-bek Yevkúrov fue designado para supervisar el entrenamiento y la adaptación de las tropas norcoreanas, a las que se les dio “unas semanas” para aclimatarse.
Además, una fuente de inteligencia militar declaró al diario local Kyiv Independent, que el 21 de octubre las autoridades rusas detuvieron a 18 soldados norcoreanos que abandonaron sus posiciones en Kursk.
En los últimos días, tanto Ucrania, como los servicios de Inteligencia de Corea del Sur vienen alertando sobre el traslado de militares de Pyongyang a Rusia para entrenarlos y posteriormente enviarlos a combatir en nombre del Kremlin en la invasión a Ucrania. Sin embargo, esta es la primera vez que señalan su presencia en la región de Kursk, lo que muestra el avance de sus traslados hacia el único foco de conflicto en territorio ruso.
El 18 de octubre, Seúl reveló que Pyongyang trasladó a 1.500 de sus soldados a Rusia para cumplir con esos objetivos. Y el miércoles 23 de octubre, la inteligencia surcoreana aumentó su estimación a 3.000, pero las investigaciones de Kiev subrayan que son al menos 12.000 los soldados norcoreanos presentes en Rusia. La OTAN y la inteligencia estadounidense también se sumaron a las afirmaciones ucranianas y surcoreanas sobre la presencia de tropas de Pyongyang en Rusia.
Interrogado sobre el tema durante una conferencia de prensa que ofreció en la jornada final del cumbre de los BRICS que se desarrolló en la ciudad rusa de Kazán, el presidente ruso, Vladimir Putin, defendió este jueves el tratado de asistencia militar mutua en caso de agresión suscrito con Corea del Norte, pero no confirmó el despliegue de tropas norcoreanas en su país.
Sin mencionar en ningún momento la posible presencia de efectivos norcoreanos, Putin destacó que el jueves la Duma rusa ratificó el tratado firmado en el mes de junio por Moscú y Pyonyang.
“Nunca hemos dudado ni un ápice de la seriedad con la que los dirigentes norcoreanos se toman nuestros acuerdos”, dijo Putin ante los medios. Rusia insistió en que el tratado no incluía artículos secretos y, de hecho, la Duma publicó íntegramente su contenido, incluido el artículo 4 sobre asistencia militar mutua.
“En caso de que una de las partes sea objeto de una agresión militar por parte de cualquier otro Estado o varios Estados y se encuentre de esa forma en estado de guerra, la otra parte le ofrecerá inmediatamente ayuda militar o de otro tipo por todos los medios a su alcance, en virtud del artículo 51 de la Carta de la ONU y en consonancia con la legislación de la Federación Rusa y la República Popular Democrática de Corea”, expresa dicho punto del acuerdo.
El tratado militar entre ambos países fue suscrito durante la histórica visita en junio de Putin a Pyonyang, la primera que realizaba el jefe del Kremlin en casi un cuarto de siglo a la capital norcoreana.