En un acto diplomático significativo, los gobiernos de Reino Unido, Francia y Canadá emitieron un comunicado conjunto en el que amenazaron con sanciones a Israel en caso de que el gobierno de Benjamin Netanyahu no detenga la renovada ofensiva militar en Gaza y levante las restricciones a la ayuda humanitaria.

El comunicado del primer ministro británico, Keir Starmer, el presidente francés, Emmanuel Macron, y el primer ministro canadiense, Mark Carney, publicado por los portales oficiales y las redes de los tres gobiernos, califica la expansión de las operaciones militares israelíes en Gaza como “totalmente desproporcionada”, y agrega que el “nivel de sufrimiento humano en Gaza es intolerable”.

“No nos quedaremos de brazos cruzados mientras el gobierno de Netanyahu persiga estas atroces acciones. Si Israel no cesa la renovada ofensiva militar y levanta las restricciones a la ayuda humanitaria, tomaremos nuevas medidas concretas en respuesta”, se expresa en el comunicado.

El domingo por la noche Netanyahu anunció que Israel reanudaría los envíos de ayuda “mínimos” a Gaza como consecuencia de la enorme presión pública para que lo haga, cuestión en la que, según informó The Washington Post, tuvo una fuerte incidencia la administración estadounidense que lidera Donald Trump. De acuerdo al informe, la Casa Blanca le hizo saber al gobierno israelí que “los abandonaremos si no ponen fin a esta guerra”.

Este lunes medios israelíes informaron que nueve camiones con ayuda humanitaria habían ingresado a Gaza a través del cruce de Keren Shalom, después de 11 semanas de bloqueo total.

Tom Fletcher, secretario de la Oficina de la ONU para Asuntos Humanitarios, declaró que el ingreso de esta ayuda era totalmente insuficiente. “Esto es sólo una gota en el océano de lo que se necesita con urgencia, y se debe permitir la entrada de mucha más ayuda a Gaza a partir de mañana por la mañana”, declaró Fletcher en un comunicado.

“Para reducir los saqueos, debe haber un flujo regular de ayuda y se debe permitir que los trabajadores humanitarios utilicen múltiples rutas. Los bienes comerciales deben complementar la respuesta humanitaria”, agregó el funcionario de la agencia de la ONU.

La decisión de Israel de permitir el ingreso de esta ayuda ínfima, que no fue votada en la sesión de gabinete del domingo, sino que fue tomada directamente por Netanyahu con el apoyo de sus ministros más cercanos, fue cuestionada por el de Seguridad Nacional, el extremista Ben-Gvir.

Su oficina emitió un comunicado, consignado por el portal israelí Ynet, en el que el dirigente ultraderechista criticó el paso dado por Netanyahu, afirmando que cualquier ayuda a Gaza, especialmente a todo el territorio, “alimentaría y oxigenaría a Hamas” mientras los rehenes israelíes permanezcan cautivos. “El primer ministro está cometiendo un grave error y carece de mayoría para esta decisión”, expresa el comunicado, y agrega: “Hay que aplastar a Hamas, no sostenerlo”.

Mientras la situación humanitaria es desesperante y la mayor parte de los hospitales de Gaza están sin funcionar, o haciéndolo al mínimo de sus capacidades, este lunes los bombardeos sobre Gaza prosiguieron, provocando decenas de asesinatos.

El lunes temprano el ejército israelí anunció la evacuación de una amplia zona en Jan Yunis, en el sur de Gaza, luego de comunicar que allí se lanzaría un ataque “sin precedentes”, generando un nuevo desplazamiento, una realidad cotidiana que se repite en la mayor parte de Gaza.

Por otra parte, las negociaciones indirectas que están teniendo funcionarios de Israel y Hamas en Qatar por ahora no están teniendo ningún tipo de avance. Un alto funcionario de Hamas, que habló bajo condición de anonimato con la agencia estadounidense Associated Press, afirmó que Israel insiste en un acuerdo parcial para liberar a algunos rehenes, aunque sin comprometerse a poner fin a la guerra.

Hamas manifestó antes del comienzo de este nuevo intento negociador que únicamente liberará a los cautivos restantes a cambio de más prisioneros palestinos, un alto el fuego duradero y la retirada israelí de toda la Franja de Gaza. Por su parte, Netanyahu afirmó en un mensaje de video que Israel alcanzaría una “victoria completa” con la liberación de los 58 cautivos retenidos en Gaza y la destrucción de Hamas.