Se estima que la semana que viene el gobierno israelí que encabeza el primer ministro Benjamin Netanyahu apruebe los planes de construcción de algo más de 3.000 viviendas en la llamada zona E1, hecho que, de concretarse, partiría en dos a Cisjordania, aislando la parte norte de dicho territorio palestino con las poblaciones del sur.

Con una firme oposición de la comunidad internacional, el plan extendería el asentamiento judío existente de Ma’ale Adumim hacia Jerusalén, separando aún más la zona este de Jerusalén Oriental ocupada de Cisjordania, territorio que, de acuerdo con la denominación administrativa israelí, se llama Judea y Samaria.

Medios locales dijeron que se espera que el Consejo Supremo de Planificación, que se reúne la próxima semana, respalde el plan tras rechazar las objeciones de varias organizaciones no gubernamentales israelíes.

Este jueves, durante la presentación del plan, el ministro de Finanzas israelí, el colono extremista Bezalel Smotrich, se jactó de creer que la construcción en E1 “enterraría la idea de un Estado palestino”.

“Quienes en todo el mundo intentan reconocer un Estado palestino recibirán nuestra respuesta sobre el terreno”, declaró Smotrich, al anunciar la inminente aprobación del plan. “No en documentos, ni en decisiones ni declaraciones, sino en hechos. Hechos de hogares, barrios, carreteras y familias judías que construyen sus vidas”, agregó el ministro. “Seguirán hablando del sueño palestino, y nosotros seguiremos construyendo una realidad judía”, afirmó. “Una realidad que sepulta la idea de un Estado palestino, porque no hay nada que reconocer ni nadie que lo reconozca”, sentenció el jerarca ultraderechista.

El controvertido plan, retrasado durante años debido a la presión internacional, tiene graves implicaciones para las perspectivas de una solución de dos estados y ya comenzó a generar críticas desde varios países. El diario israelí Haaretz informó que Egipto y la Autoridad Palestina condenaron los planes anunciados por Smotrich.

“Esta medida refleja el plan del Estado de Israel de apropiarse de tierras palestinas y modificar la situación geográfica de las tierras que ocupa, en flagrante y completa violación del derecho internacional y las normas del Consejo Internacional”, expresó en un comunicado el Ministerio de Asuntos Exteriores egipcio.

También la Unión Europea (UE) condenó de inmediato el plan colonizador del gobierno israelí. “La UE rechaza cualquier cambio territorial que no forme parte de un acuerdo político entre las partes implicadas. Por lo tanto, la anexión de territorio es ilegal según el derecho internacional”, declaró la portavoz de la Comisión Europea, la alemana Anitta Hipper.

Por su parte, el ministro de Asuntos Exteriores noruego, Espen Barth Eide, afirmó que la medida anunciada por Smotrich demuestra que Israel “pretende apropiarse de tierras palestinas para impedir una solución de dos estados”.

Este jueves hubo pequeñas movilizaciones en las ciudades israelíes de Tel Aviv y Haifa pidiendo el retorno de los rehenes y en contra de la ampliación de la operación militar en la Franja de Gaza.

El fin de semana, luego de la finalización del Shabat, se esperan manifestaciones masivas en contra de los planes del gobierno de invadir la ciudad de Gaza y reclamando el fin del conflicto y por los rehenes que todavía permanecen cautivos en el subsuelo gazatí.

Este jueves, un grupo de rehenes que fueron liberados en el inicio del año, Naama Levy, Ohad Ben Ami, Doron Steinbrecher, Sasha Troufanov, Arbel Yehoud e Iair Horn, así como Michal Lubanov, la esposa del rehén asesinado Alex Lubanov, hicieron un llamamiento mediante un video al presidente estadounidense Donald Trump, exigiendo un acuerdo integral sobre los rehenes y advirtiendo contra la expansión de los combates en Gaza.

Naama Levy inició el video diciendo: “Presidente Trump, queremos agradecerle por traernos a casa. Sabemos que no fue fácil. Su liderazgo y su valentía nos devolvieron la vida y a nuestras familias. Estamos aquí hoy porque usted decidió actuar”.

Otro rehén liberado, Iair Horn, agregó: “Presidente Trump, usted tiene el poder de cambiar la historia, de ser el ‘presidente de la paz’ que puso fin a la guerra y al sufrimiento, y trajo a todos los rehenes a casa”.

Los demás rehenes liberados hablaron de las dificultades que atravesaron durante su cautiverio y de cómo la expansión de los combates en Gaza pone en peligro la vida de los rehenes, e hicieron hincapié en la necesidad de un acuerdo urgente para liberarlos.