La comisión que estudia la reforma de la seguridad social en el Senado recibió en la mañana del jueves al directorio del Banco de Previsión Social (BPS). Durante tres horas se expuso sobre el detalle del proyecto, con especial énfasis en cómo afecta a la entidad, y se respondió algunas preguntas puntuales de los senadores, según comentó en una rueda de prensa el presidente del directorio, Alfredo Cabrera, quien aseguró que la reunión terminó “con saldo positivo”.

Cabrera afirmó que “los directores políticos del banco tenemos una opinión favorable al proyecto y estamos preparándonos para instrumentar la próxima reforma”. La diferencia está con los representantes de los trabajadores que se oponen al cambio de normativa y señalan que habrá rebajas de entre 10% y 38% en las futuras jubilaciones con la reforma del gobierno.

Consultado por la diferencia en los planteos, Cabrera destacó que no conoce la metodología con la que hicieron sus cálculos los trabajadores, pero que las proyecciones elaboradas por la comisión de expertos que instaló el Poder Ejecutivo y las que hizo el equipo del BPS indican que “hay una mejora en las más bajas y se mantiene igual en las restantes” jubilaciones. En este sentido, destacó también que “la tasa de adquisición de derechos es la misma en el régimen actual que en el proyectado”.

Otra de las críticas que se le ha hecho al proyecto es que se concentra en las jubilaciones y no en toda la seguridad social: “Creo que es una reforma del sistema de seguridad social, como fue una reforma en la pandemia sobre el seguro de desempleo. La seguridad social es muy amplia, hay prestaciones de actividad, de pasividad, en pandemia hubo un montón de modificaciones al seguro de desempleo, eso fue una reforma de la seguridad social en un área específica, ahora hay una reforma que hace hincapié principalmente en prestaciones de pasividad; seguridad social es un concepto global”, indicó Cabrera.

De todas formas, el presidente del BPS comentó que “es lógico que cada uno de los directores que han sido electos represente al colectivo que lo eligió y exprese su opinión, es un ejercicio de democracia muy bueno”. Agregó que se estudiarán las cifras que presentaron los trabajadores para analizar cuáles son los parámetros que plantean, aunque matizó: “Los números y modelos de la comisión de expertos y el departamento actuarial del banco no arrojan eso”.

Cabrera destacó que en 2033 empiezan los primeros cambios en el sistema y se terminará en 2043. A pesar de esta distancia en el tiempo, el BPS comenzó a prepararse, porque de aprobarse la reforma durante los próximos años convivirán dos sistemas: “Tenemos un desafío de gestión muy importante que va a implicar inversión en tecnología y desarrollo de procesos, que vamos a aprovechar para modernizar nuestros sistemas y tener una transformación tecnológica necesaria”.